Alberto Perassi relató cómo fueron los momentos posteriores a la desaparición de su hija. La relación con su yerno, cómo conoció a Strumia y las horas que siguieron a la última vez que se supo de Paula. La última charla que tuvo con quien fuera el amante de su hija y cómo le pidió que le diga qué pasó.

Este mediodía, Alberto Perassi aportó su testimonio en el juicio por la desaparición de su hija.

«Paula es la segunda de mis hijas, vivía con Ortiz de Elguea, pareja que había hecho y tuvo dos hijos, uno llamado Lucas y el otro Agustín. Era una buena  chica, de chiquita le inculcamos lo mejor de nuestra familia. Convivía siempre con nosotros más allá de que estábamos en distintas casas, más allá de la convivencia telefónica… Era una chica normal que estaba en su casa, que era ama de casa, que estaba con sus hijos, que adoraba mucho a sus hijos».

En relación a la pareja de Paula, su padre dijo: «Siempre lo ví bien, él era una persona que le gustaban los chicos, estaba siempre con los chicos. Siempre ví una buena relación, más allá de lo que aparece después que no había una buena relación, a lo último, pero mi mujer y yo no nos dimos cuenta de lo que pasó, porque ella seguía igual».

Con respecto a Gabriel Strumia, Alberto Perassi relató:  «El señor Strumia, antes de que pasara todo esto lo conocía de vista, de encontrarnos en algún lugar de repuestos, después hubo una convivencia muy especial, a lo último, cuando yo competí con un Jeep y él compró uno y ya después se hizo de la familia del Jeep. Ahí encontramos, como quien dice, una amistad y tal es así que yo le hacía el motor del Jeep de él,  le ayudaba, estaba siempre con él porque yo siempre lo consideré amigo y él, en especial, me consideraba el segundo padre y ahí empezó una amistad. Íbamos a las carreras, de vacaciones, era una buena relación y nos juntábamos para ir al camping para ir a jugar con los Jeep… »

También contó que la familia asistió al cumpleaños de 40 de Strumia y que una de las fotos sacadas esa noche fue la que Strumia le llevó para que la lleve a la policía, al día siguiente de la desaparición de Paula.

Alberto contó que estaban reunidos con el marido de Paula y su esposa y surgió  el nombre de la mujer adonde Paula había dicho que iba a buscar la tarea de su hijo: Elsa. «Quién es Elsa, pregunto yo. Y Rodolfo me dice: Elsa es la amiga del Gabi.  Entonces me voy de Gabi como tantas veces y cuando entro al predio y ve la camioneta, él estaba hablando con una persona, se sorprende y deja al cliente parado y se viene a mí.«

En su oficina, le comenta que quiere saber la dirección de Elsa, y le cuenta que Paula en la noche desapareció, salió y no volvió y dijo que iba a la casa de Elsa. » Uhhhh , hizo una expresión así, caminó tres o cuatro metros y volvió y me sorprendió, qué amigo que tengo, cómo le cayó que Paula no vuelva a la casa». Alberto fue a Puerto San Martín a hablar con «esta persona que tiene una florería, frente a la plaza, la señora me dice que Paula no estuvo.  Me vuelvo a mi casa y cuando llego lo encuentro a Strumia abrazado a mi mujer en la puerta del taller, llorando, y ahí decido hacer la denuncia y trae esa foto».

Después, siguió Alberto, «Nos vamos a la comisaría y él llega (Strumia) y nos da la foto. Ahí, en la puerta de la comisaría me dice: Buscalo a Daniel Puyol que es mi amigo, Daniel Puyol te va a dar una mano acá adentro y se fue. Así lo hice, recorrí toda la unidad regional 17 buscando a Puyol y no estaba. Llegué hasta la oficina de Cuerpos y me dijeron que no estaba y posiblemente no volviera. Nosotros hicimos la denuncia y salimos, nos sentamos a esperar y con Rodolfo a la par le digo: qué suerte que nos atendieron rápido, ¿será que Puyol está trabajando en esto?

Otro contacto con Strumia 

«El día 20 a la mañana suena el teléfono a las 8 de la mañana. Él, (Strumia) llorando me cuenta que había recibido a la madrugada un mensaje de Paula. Viene y me muestra el mensaje y decía algo como «estoy llegando a San Juan. Ahora estoy bien. Por fi no digas nada». Esas palabras no las recuerdo bien bien pero algo así decía. No recuerdo bien el número de teléfono, me parece que era del número de Paula. Esa información la llevé a la policía.»

«Al segundo día comienzo a ir a la Oficina de Investigaciones. Yo me acuerdo que al tercer día, el señor Godoy me dijo que tenían que pedir la tira telefónica. Yo automáticamente le dije que se la daba porque eran teléfonos de Personal, de la flota y te daban inmeidatamente  la lista. Al segundo o tercer día ya tenían la lista y de ahí sale lo que pasó con Paula. Qué es lo que pasó con Paula, que a Paula la llamaron de una cabina pública de 3 de febrero y Dorrego y salta que el último llamado la habían llamado de ahí. En esos días, cuarenta y pico de llamados de Paula a Strumia y salta esa llamada ahí y de ahí en más me dijeron que iban a ir a la cabina pública. Ahí había unas cámaras pero no sacaron el disquete, lo hicieron a los once días cuando ya estaba pisado», relató Perassi.

El padre de Paula manifestó que el oficial Godoy fue a esa cabina, fue dentro de la semana en la que llegó la tira telefónica y ahí comenzó a desvirtuarsesu amistad de Strumia.  «Porque cuando yo empiezo a ver, que me lo leyó Godoy, cuarenta y pico de llamadas, digo qué pasa acá. Por qué tantos llamados?»

También dijo que en la  semana posterior a la desaparición de Paula pasaron muchas cosas y que  cuando se empezaron a vislumbrar cosas fue a hablar con Strumia. Un día fue a su predio y le dijo:  «Bueno, Gabi, decime qué pasó con Paula. Adonde está Paula, si ustedes tienen algo yo no les vengo a reprochar nada. Me dijo que no tenía nada que ver.  Y cuando me subo a la camioneta, me dice: Yo sabía que iba a pasar esto.»