Una mujer denunció el calvario que vivió junto a su ex pareja, quien no se presentó hoy a audiencia

Esta mañana, en los tribunales de San Lorenzo, debía realizarse una audiencia imputativa, y una medida cautelar alternativa a la prisión contra Juan José Martínez, un hombre que está acusado de violencia de género, resistencia a la autoridad entre otros delitos. Pero el acusado no se presentó a la audiencia.

La víctima, Micaela, contó en primera persona, el calvario que convivió con Martínez desde hace años: “Estuve en pareja con mi agresor durante 18 años al principio como todo era color de rosa , a veces más que un grito o una discusión fuerte más que eso no pasaba y yo lo tomaba normal, luego llegó mi primera hija y los primeros 5 años de ella la pasamos más o menos bien con algún que otro golpe y luego el perdón. Yo todavía seguía cegada con cada palabra de él”

Y continúa: “Después de 6 años tengo mi segundo hijo aún cuidándome con anticonceptivos, y empieza el caos; todo el embarazo con golpes, amenazas muy psicópatas, como que me robaba mi hija y no la veía más, que mataba a mi hermanito, que le prendía fuego la casa a mi mamá y yo si lo creía capaz de todo ya que había visto un episodio en que le prendió fuego la casa a su propia madre. Y los golpes seguían ,los insultos sus drogas el alcohol y más golpes y más insultos. marcas en mi piel de quemaduras, fracturas en varias partes de mi cuerpo, hasta traumatismo de cráneo y el mismo me llevaba al hospital me dejaba en la puerta y que le avisara cuando me terminaran de atender y el ya había armado lo que tenia q decir, que me había caído , que me había golpeado la cabeza con alguna puerta y yo seguía callada porque el tenia a mis hijos”.

Hasta que la violencia fue en escalada: “Un día fue el revelador el día que se me cayó la gran venda de los ojos convivíamos en la misma casa pero separados , así casi dos años pero un día su droga lo llevó al extremo, muchos golpes hacia mi y me secuestró a mis hijos , dejando a mi hija en un búnker de drogas y mi hija mandándome fotos y mensajes de donde estaban, mi desesperación era tan grande, impotencia llantos ,ya me había olvidado de los golpes no sentía los dolores ,sino el dolor del alma de no saber dónde tenía a mis hijos , hasta que por fin después de muchas horas el regresa muy drogado y con mis hijos se habían caído de la moto y ahí me vuelve a pegar.”

“Mi hija con tan solo diez años llamó la policía les dijo que su papá le estaba pegando a su mamá q ella les dejaba la puerta abierta y que vinieran sin luces en sus autos y q entrarán . Y así fue entraron los encontraron justo se lo llevaron 12 hs detenido y desde ahí empieza mi calvario con restricciones hacia mi y a mis hijos pero el señor viene a mi domicilio cuando quiere, poseo botón antipánico pero antes de q llegue la policía el ya se fue y siguen las amenazas, La secretaría de género me llevó a un hotel de resguardo y mis vecinos avisándome que el me estaba rompiendo mi casa y vendiendo todo lo q podía. Llamo la policía, voy con ellos y lo encontramos durmiendo dentro de mi casa me había vendido hasta la garrafa, por supuesto grabé todo con mi celular y luego de 9 hs el ya estaba en libertad”, agregó la víctima.

“Últimamente viene y me deja una bolsa negra colgada en mi portón diciendo q ahí voy a terminar muerta , mensajes x mensegger de facebook donde me amenaza que me va a matar y así y todo el juez y su defensor dicen q está enfermo por las drogas el sigue libre hostigándome anda a media cuadra de mi casa y me espía de un puente, Mis hijos y yo somos los presos que no podemos salir ni a una plaza, solo salimos con mucho cuidado para ir al colegio y con muchos protocolos para despistarlo ya que también se hizo presente en los colegios de mis hijos. Hoy tenía ganas q todo el mundo sepa quién soy y que no algún día está historia la tengan q contar mis hijos o mi madre pidiendo justicia porque mi agresor llamado Juan José Martínez cumplió con su promesa”.

Ahora, la oficina de gestión judicial deberá fijar una nueva fecha de audiencia, y no se descarta que sea traído por la fuerza.

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