Las costureras realizan camisolines y batas, y pronto sumarán barbijos, con el propósito de abastecer al efector local en el marco de la pandemia de coronavirus.
Un grupo de costureras sanlorencinas confeccionan de manera totalmente desinteresada elementos de protección personal que destinarán al hospital Granaderos a Caballo, frente a la posibilidad de que resulten necesarios en el marco de la pandemia de coronavirus. La idea original fue del concejal Gustavo Oggero, quien promovió la iniciativa entre las voluntarias.
Hasta el momento, las mujeres han realizado camisolines y batas, que ya están en poder de las autoridades del hospital, y ahora elaborarán barbijos.
Qué opinas?