Este lunes, la Provincia de Santa Fe derribó un búnker de drogas en Rosario, ubicado en calle Piamonte al 2400. La acción se realizó en el marco de la ley de Microtráfico, que permite intervenir inmuebles usados para la venta de estupefacientes y otros delitos vinculados a la violencia. El operativo buscó frenar la circulación de drogas y la presencia de delincuentes en el barrio, reforzando la seguridad de los vecinos.

Operativo y hallazgo del búnker de drogas en Rosario

El ministro de Justicia y Seguridad, Pablo Cococcioni, supervisó el derribo junto al fiscal Franco Carbone. Según fuentes oficiales, el inmueble no solo funcionaba como punto de venta de drogas, sino que también servía como escondite para delincuentes tras cometer robos u otros ilícitos.

El lugar fue detectado gracias a tareas investigativas y procedimientos en flagrancia, que permitieron confirmar su utilización para actividades ilegales. Las autoridades señalaron que este tipo de operativos requieren un seguimiento detallado y coordinación entre la policía y el Ministerio Público de la Acusación.

Impacto en la seguridad y la comunidad

Cococcioni destacó que inactivar estos búnkeres es clave para proteger a los vecinos, quienes estaban expuestos a tiroteos, balaceras y circulación de delincuentes. “Esto tenía que terminar”, señaló, subrayando la importancia de eliminar estos puntos de violencia.

El operativo no solo busca desmantelar la venta de drogas, sino también generar un efecto disuasivo frente a posibles actividades delictivas en la zona. Los vecinos manifestaron alivio tras conocer la intervención y aseguraron que estas acciones aumentan la sensación de seguridad en el barrio.

Relación con bandas delictivas

La zona tiene un historial de actividad vinculada a la banda Los Monos, específicamente al sector liderado por Leandro ‘Pollo’ Vinardi. Según el ministro, este búnker constituía un desprendimiento de dicha organización, consolidando su control en la venta de drogas en la zona.

Las autoridades remarcaron que los inmuebles como este se utilizan no solo para el tráfico de estupefacientes, sino también como punto de encuentro y coordinación de otros delitos menores, lo que aumenta la peligrosidad para la comunidad.

El derribo del búnker de drogas en Rosario refuerza la estrategia de la Provincia para combatir el microtráfico y mejorar la seguridad en los barrios. La acción demuestra un compromiso activo con la protección de la comunidad y la reducción de la violencia asociada al narcotráfico. Estas intervenciones continuarán realizándose en toda la ciudad para garantizar un entorno más seguro para todos.