Comienza juicio oral contra una mujer que chocó a una joven y que quedó con graves consecuencias físicas y neurológicas

Este miércoles comienza el juicio oral en los tribunales de San Lorenzo contra Mariela Benítez, una mujer que colisionó en la parte izquierda de su automóvil Volkswagen Gol, con el lateral derecho de una motocicleta. donde resultó lesionada gravemente una joven llamada Romina que en ese entonces tenía 17 años, y que fue embestida cuando iba de acompañante el rodado menor, el 10 de octubre de 2017 en Sarmiento e Hipólito Yrigoyen de San Lorenzo. La Fiscalía la imputó por lesiones culposas gravísimas en accidente de tránsito y solicita la pena de 3 años de ejecución condicional y cuatro de inhabilitación para conducir, pero la querella, pretende que la prisión sea efectiva.

El tribunal de Juicio está integrado por el Juez de Primera Instancia Dr. Eugenio Romanini.

El siniestro vial ocurrió a las 14 horas cuando un automóvil conducido por Benítez y la motocicleta en la que Romina iba de acompañante circulaban por Sarmiento, cuando el auto dobla por Yrigoyen y los embiste. El conductor del rodado menor no tuvo lesiones de importancia, pero la joven sufrió graves consecuencias físicas y psicológicas hasta el día de hoy. La fiscal le achacó a Benítez que mientras conducía un automóvil Volkswagen Gol por calle Sarmiento en sentido cardinal este a oeste, en la intersección de calle Hipolito Irigoyen de San Lorenzo, giró a la izquierda y en esa maniobra colisionó en la parte delantera izquierda de su vehículo con el lateral derecho de una motocicleta Honda, la cual se desplazaba en el mismo sentido cardinal. Esta última era conducida por una persona quien llevaba como acompañante a la víctima provocando con dicha colisión la caída de sus ocupantes y ocasionándole a esta última lesiones gravisimas. Todo eso mediante la conducción en forma imprudente, negligente y antirreglamentaria de un vehículo Volkswagen Gol, violando los deberes de cuidado consistente en realizar un giro hacia su izquierda no advirtiendo que por la misma arteria se desplazaba una motocicleta por detrás colisionando con la misma con la parte delantera izquierda al lateral de la motocicleta.

Romina, fue trasladada al hospital Granaderos a Caballo con un  traumatismo craneoencefálico: “Un policía que me conocía, porque mi esposo era también policía me vino a buscar y me dijo negra tu hija se muere, le dije que mi hija no se iba a morir” recordó angustiada Rosana, madre de Romina. “En el hospital, hablando a lo bruto me dijeron que Romi estaba descerebrada y que no había posibilidad de salvarla”.

Desde ese entonces, Romina sobrevivió y estuvo internada pasando por numerosos nosocomios y centros de rehabilitación, debido a las graves secuelas que le dejó el accidente: ” Ahí comenzó toda la odisea que pasó por un montón de clínicas y hospitales de la región.Ella estuvo en el hospital de Granadero Baigorria dos meses y medio. Fue trasladada cuando conseguí la mutual. Porque ella no era hija de mi esposo, pero él la tenía a cargo. De ahí me la trasladaron al Sanatorio Norte. Del allí la trasladan a la clinica Plus Vita donde sufrió descompensaciones, entonces iba y venía. Estuvo en el Norte, fue al Sanatorio Laprida, volvía a la clínica Plus Vita. De ahí volvía al Sanatorio Americano donde le diagnosticaron hundimiento de cerebro. Entonces se le hace toda una plaquetación con un casco dentro de su cabeza, donde que alquilar un motor, y yo no contaba con dinero y desde el municipio de Puerto General San Martín se hacen cargo de alquilar ese motor. Es más, desde el municipio de Puerto hace 7 años que a mí me trasladan cada vez que yo lo necesito. Porque hay un seguro que tiene esta chica ( la imputada) que es Zurich, pero hasta el momento no se han hecho cargo de nada”, relató Rosana.

Hoy Romina va todos los días a una clínica de rehabilitación en Puerto San Martín. “Hoy es una paciente psiquiátrica. Porque todo esto ha quedado, ella ha perdido un montón de cosas. Su sueño, en lo que ella por ahí alguna vez puede manifestar, es volver a ser peluquera. Porque ella la peluquera era una nena activa, con ganas de vivir, de salir adelante. Trabajaba todas las semanas. Siempre estaba impecable, bien maquillada, bien arreglada. Y hoy Romy no es Romy”, cuenta Rosana.

Actualmente Romy que tiene 28 años, está en silla de ruedas y hay que asistirla permanentemente: “hay que bañarla, hay que cambiarla. A la mañana pasa una enfermera todos los días del lunes a domingo a controlarla Porque ella tiene un traumatismo encelofalodraneano. Una vez a la semana pasa un médico. Después hace rehabilitaciones como psiquiatría, porque estuvo dos veces en neuropsiquiátricos, tiene esquizofrenia. Después hace psicóloga, ocupacional, kinesiología, fisiatría. “, explicó angustiada la mamá.

“Romy pesaba 42 kilos al momento de su accidente. Dos meses después pesaba 80 kg y logramos bajar algunos kilos con nutricionistas”, todos estos costos de profesionales cuestan dos millones al mes mensuales, algunos costos son solventados por la mutual y otros por Rosana con su trabajo. Tuvo que recurrir a solicitar una medida cautelar ante la justicia de Familia para que Romina pueda ser atendida.

“Además, Romy tiene una insanía de un 150%. De un 100% de ella y un 50% por mí, para estar permanentemente al cuidado de la vida de Romy” señaló Rosana quien sostuvo que la pena solicitada por la Fiscalía no es nada, y que hasa el momento tampoco le quitaron la licencia de conducir a Benítez, quien trabaja en el hospital de San Lorenzo.

Cuando fue fue el accidente de Romy, yo tenía un negocio muy grande y nos llevó a perder ese negocio. Y bueno, llegué a juntar ropa usada para comprar los pañales a ella en los primeros años. Había recursos, pero no eran suficientes, porque a Romy le ponían de a tres pañales, porque todo se pasaba, la ataban de pies y manos, porque se comía hasta la materia fetal. Mi hija llegó a eso. O sea, su estado ha sido que ya no coordinaban es una cosa así”, señaló la mamá.

“Ella (por la acusada) no muestra nada de preocupación. Es más, anterior al juicio, yo llego y el defensor habla con mis abogados y de manera verbal le dice hagamos un combo, ¿qué te parece? O sea, las palabras del doctor fueron hagamos un combo. Sentí tanto dolor. Sentí tanto dolor. Y ese día adentro ellos hicieron un ofrecimiento para no ir a juicio de un millón de pesos. Y en aquel tiempo estaba el doctor, el juez Gazza, {el era el primer juez de garantía, sería. Y lo dejó agendado el ofrecimiento, dijo que no estaba ofreciendo nada”

“Me parece que la vida de esta chica, siete años perdido, cinco años internada. Romy, calculo, tiene un gasto de casi dos millones de pesos por mes o más, tiene trece medicaciones, medicaciones psiquiátricas permanentes. Un gasto de la mutual que me asiste con seis pañales por día, pero Romy gasta cerca de doce pañales porque momentos que se los arranca, que hasta la materia fecal hay que juntar, limpiar, lavar, higienizar. Esa es la vida de mi hija. No tenemos un baño para higienizarla en la cama, tampoco tenemos una puerta en su pieza acorde a las medidas. Tuvimos que sacar la puerta placa que teníamos para pasar a la silla de ruedas y poner una cortina. O sea, cosas necesarias para su bienestar”, contó la mujer.

Qué opinas?

Más del autor