En el 10º día del juicio que se lleva a cabo en el Centro de Justicia Penal por la desaparición de Paula Perassi declaró también  el miembro del Equipo Argentino de Antropología Forense, Juan Nóbile, quien habló de la situación en la que quedan las familias con la desaparición de una persona. Nóbile trabajó en una cava ubicada en el límite entre Puerto Gral. San Martín y Timbúes durante el año 2015 a raíz de una denuncia en la que señalaba que el cuerpo de la mujer desaparecida podría encontrarse enterrada allí.

“Estamos hablando de la desaparición como uno de los hechos más trágicos que puede sucederle a una familia. Impide saber la verdad y la posibilidad de elaborar un duelo”, dijo. Además, indicó que el trabajo del Equipo comienza cuando hay una ventana de tiempo en la que la persona en cuestión se presume fallecida. 

También señaló que cuando inician su trabajo no se duda sobre las familias o las víctimas. 

El profesor indicó que los restos de Paula se buscaron en una cava en el límite entre Puerto San Martín y Timbúes y en otros espacios que surgían del expediente judicial. Dijo que se decía que el cuerpo había sido quemado.

El experto habló de la estructura que requiere la desaparición de una persona. “Una chica de clase media de San Lorenzo, con dos hijos, no puede desaparecer un domingo a la tarde noche sin dejar rastros si no hay una estructura que genere esta condición de desaparecida”.

Y añadió:  “una mujer no puede desaparecer del centro de San Lorenzo sin dejar rastros, si no hay una estructura que genere esta condición de desaparecido. Para lograr una desaparición partimos de la base de que se requiere una estructura, que puede ser policial, judicial, vinculada a poderes económicos, porque se requiere un accionar que genere este tipo de desaparición, que no genere ningún tipo de registro”, y reiteró: “para lograr estas desapariciones se requiere determinado tipo de poder, en el caso que nosotros trabajamos se refiere a fuerzas de seguridad”.

Nosotros buscamos restos de personas. Partimos de la base de dar por hecho que Paula está muerta, por eso empezamos a actuar como equipo de antropología forense, porque no hay ningún tipo de indicio físico de esa persona. No podríamos actuar si tuviéramos dudas de que esa persona podría estar viva”.