Por el DNU del presidente Javier Milei, el Instituto Nacional de la Yerba Mate dejará de fijar el valor para las operaciones con hoja verde. Mientras comienza oficialmente la cosecha gruesa de la hoja verde, también empieza la desregulación de precios tras 22 años.
El Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) perderá a partir de este lunes 1 de abril la potestad de fijar los valores de la hoja verde que se vende a secaderos e industrias, como consecuencia del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/2023 del presidente Javier Milei. Esto llevará a la desregulación de los precios en el sector, lo que podría dar lugar a nuevos y significativos aumentos.
Desde el INYM han advertido que este cambio podría perjudicar al pequeño productor, ya que el precio de la hoja verde está vinculado al volumen de los stocks de yerba canchada que mantienen las industrias. Si las reservas son altas, el precio tiende a disminuir debido a una menor urgencia de compra por parte de las empresas.
Esta medida marca un cambio significativo en la política regulatoria del sector de la yerba mate y sus implicaciones podrían afectar tanto a los productores como a los consumidores finales.
La desregulación en la industria de la yerba mate no solo afecta la materia prima, sino que también tiene un impacto en la presión sobre las industrias para abastecer las góndolas con yerba a precios accesibles. Durante años, las empresas estuvieron obligadas a ofrecer productos a precios controlados por el gobierno.
Con la nueva situación, alrededor de 12.000 pequeños productores se enfrentan a la decisión de aceptar los precios ofrecidos por su hoja verde o optar por no cortarla y esperar a que los valores mejoren. Actualmente, se paga 370 pesos por kilo de hoja verde, mientras que los productores demandan 500 pesos. Esta situación genera incertidumbre entre los argentinos, ya que el movimiento impactará directamente en el costo de su infusión preferida.
Desde el Instituto Nacional de la Yerba Mate, el sector que aboga por la regulación anticipa que este tipo de mercado, con muchos vendedores y pocos compradores, terminará perjudicando al pequeño productor.
Por otro lado, la desregulación alivia la presión sobre las industrias en cuanto a la necesidad de abastecer las góndolas con yerba barata. Desde principios de la década pasada, las industrias fueron obligadas por los distintos gobiernos nacionales a abastecer el mercado con productos accesibles.
Qué opinas?