«Acá hay gente que no está nombrada, que tiene responsabilidad de esa pata política que no es de un sólo partido», disparó el ex fiscal Gustavo Ponce Asahad  durante la audiencia de reimputación que se realizó el pasado jueves donde Ponce Asahad prendió un ventilador  y acusó a funcionarios del Estado, ex policías, miembros del Ministerio Público de la Acusación, entre otros. Su declaración que duró cerca de cuatro horas fue una bomba dentro del PJ provincial que por estas horas vive uno de los momentos más tensos en décadas.

El ex fiscal Ponce Asahad llega a la nueva audiencia del viernes preso en una celda del servicio penitenciario desde el mes de agosto, cuando los fiscales Matías Edery, Luis Schiappa Pietra, Gisela Paolicelli y María Eugenia Irribarren descubren una organización que se dedicaba al juego clandestino que operaba en Rosario, Villa Gobernador Gálvez, Gálvez y Rafaela, donde utilizaban ese dinero ilícito proveniente de la recaudación que era generada por una red de casas de juegos de azar ilegal y apuestas efectuadas por medios electrónicos. Esa organización delictiva estaba encabezada por el ex fiscal regional Patricio Serjal y por Leonardo Peiti, un empresario dedicado a las máquinas de azar; pero por debajo de estos dos, había otros involucrados con roles dentro de esta estructura como Nelson Ugolini, también empleado del Ministerio Público de la Acusación, el ex policía Alejandro Torrisi y David Perona, quien murió en prisión domiciliaria tras contraer coronavirus el pasado 22 de noviembre. Los ex funcionarios del MPA están imputados por omitir perseguir penalmente los delitos  y  de brindar información reservada a personas con el objetivo de hacer fracasar cursos investigativos.

En esta audiencia, Ponce Asahad solicitó obtener la prisión domiciliaria y aseguró que seguirá colaborando en la investigación, aunque luego de la misma, fue trasladado por razones de seguridad a otra cárcel fuera del servicio penitenciario hasta el 2 de febrero del 2021. 

Una frase (bastante machista) dice que no hay nada peor que una mujer despechada, pero Ponce Asahad dio muestras que un hombre despechado, enojado porque le soltaron la mano, puede tener consecuencias que aún días después no puede dimensionarse.

Ponce Asahad fue directamente contra el senador del departamento San Lorenzo Armando Traferri a quien apuntó de ser la pata política de esta organización: “La vinculación de Peiti con el Ministerio Público de la Acusación se produce a través del senador Traferri con el Dr. Serjal en una reunión que mantuvieron en el edificio de calle Montevideo en la sede regional de Rosario. Me entero porque entré a la planta baja y lo vi al senador Traferri, que me dijo pasame tu número que tuve una reunión con Serjal por un tema de una causa que estuvo medio quieta; yo le pasé mi teléfono, me dice te hago una llamada perdida y ahí me llamó a mi teléfono. Las antenas ( de ambos)  deberían dar en el mismo lugar”, dijo el ex fiscal, quien dejó una pista en la investigación para que los fiscales corroboren ese encuentro. 

“Yo cometí errores, no me quiero excusar, tendría que haber tenido la entereza suficiente para denunciar oportunamente determinadas situaciones  y no lo he hecho(…) también fui abusado en el marco de lo que son las relaciones interpoderes, en los poderes se da entre funcionarios una cierta relación con integrantes de otros poderes del estado por razones obvias”.

Ponce Asahad fue brindando información de los encuentros que se dieron con Leonardo Peiti y Patricio Serjal, como también con los abogados Anibal Porri y Luis Rossini ( en distintas oportunidades y por separado) y con el senador Traferri. Los encuentros habrían comenzado en 2017 y se dieron en bares, cocheras o en el Club Sirio Libanés de calle Dorrego al 2000 de Rosario. También habló de cifras: que Serjal le pidió 100 mil dólares para frenar  la investigación a Peiti y que él recibió en cuatro oportunidades, dinero de Serjal que le daba el abogado Porri de parte de Peiti; pero agregó otras sumas en dólares que les entregaban para Serjal en bolsas o cajas de zapatos.

También contó que Peiti le pagaba a la banda Los Monos una suma de dinero: “A mi me da miedo decir esto, me dijo si le estoy poniendo a los Monos, les voy a dar una mano. Peiti había pactado con esta banda, a través de  Anibal Porri, donde había pactado a través de una plata que les daba 5000 dólares mensuales a cambio de  la instalación de todo lo que es software, soportes tecnológicos para que esta gente operara con salas clandestinas”, aseveró Ponce Asahad.

La vinculación con la banda Los Monos y el juego clandestino se destapa a raíz de un tiroteo en el casino City Center de Rosario ocurrido en enero de este año donde muere un apostador de 64 años. La investigación de ese hecho reveló que Maximiliano «Cachete» Díaz era quien extorsionaba a empresarios del juego bajo las órdenes de Ariel Guille Cantero, líder del clan narco y que estaba detrás de ese tiroteo para cobrar una suma de dinero. En una serie de escuchas y de capturas de pantalla de mensajes de teléfono, se encuentran con Leonardo Peiti, quien se jactaba ante Díaz de tener protección de fiscales y de policías. Eso fue el puntapié inicial de toda la causa que llevó a la detención de los fiscales Serjal, Ponce Asahad y del empleado Nelson Ugolini.

También en la declaración de Ponce Asahad hay otros funcionarios del Estado como el ex ministro de gobierno Carlos Carranza y ex diputado nacional, oriundo de San Lorenzo, a quien identifica como otro operador político en este entramado: “la gran pata política se va a abroquelar y no va a soltarle la mano al senador Traferri entre otros. Estoy casi seguro que no vamos a ver celeridad en los procedimientos que tengan que ver en la legislatura con gente que tiene que ver en esta investigación, no creo que pidan desafueros o que haya celeridad, no creo que convoquen a una asamblea legislativa con la rapidez en que removieron a este ex fiscal” señaló.

«Le dije al senador que Serjal decía que todo lo que hace es de parte de Carranza. Me dijo acá (Traferri) «evidentemente se cortaron solos y mordieron los tres. Averigüen si el doctor Carranza cambió su auto en la misma fecha que el doctor Serjal», preguntó.

El vínculo policial

Ponce Asahad, habló de asados en la casa del senador Traferri, a la que habrían acudido funcionarios judiciales de alto rango, y también declaró sobre vínculos con policías y hechos de corrupción. Uno de ellos es ente el abogado Anibal Porri, amigo de Peiti desde la infancia y el ex jefe de la Unidad Regional Gonzalo “Chino” Paz, donde el ex fiscal deslizó que habría una sociedad entre ellos para poner una agencia de seguridad con ex policías, debido a la gran cantidad de robos que ocurrían en la zona portuaria.  Además Ponce señaló que el ex comisario Paz y el abogado Porri compartían una camioneta y una casa de fin de semana. Además, también vinculó al ex jefe de la Policía de Investigaciones Daniel Corbellini como quien recibía dinero de parte de Peiti.

La audiencia de Ponce Asahad fue enviada con copia a la legislatura debido a la gravedad institucional que esto conlleva. Según fuentes judiciales, los fiscales de la Agencia de Criminalidad Organizada tienen corroboradas algunas de las declaraciones de Ponce Asahad, y es por ello que pidieron que dicha audiencia fuera pública, a pesar de las reservas que tuvo la defensa del ex fiscal y el propio Poce Asahad que dijo sentir temor de lo que podría ocurrile. 

Los fiscales deberán chequear cada uno de los datos que señaló el ex fiscal para darle forma a esta banda delictiva relacionada con el juego clandestino. Mientras tanto, en el PJ provincial estalló una bomba en la cuál algunos senadores hablar de solicitar el desafuero de Traferri, que por estas horas mantiener un silencio de radio mientras estudia con sus abogados una estrategia a seguir.