El enviado del gobernador Perotti, el ministro de Gestión Pública, Marcos Corach, se refirió al reclamo de seguridad y corte de la autopista y dijo que el sábado cuando llegó intentó poner calma pero le resultó muy difícil. “Yo ya tengo unos años en la política y tengo la capacidad de discernir y diferenciar cuándo es genuino y cuándo está armado”, sostuvo el representante del gobierno provincial.
El ministro de Gestión Pública de Santa Fe, Marcos Corach, estuvo este sábado por la tarde en el reclamo de seguridad que derivó en el corte de la autopista en el kilómetro 22. La medida, encabezada por la Asociación de Taxistas locales y acompañada por el intendente Leonardo Raimundo y vecinos de la ciudad fue consecuencia del hecho en el que fue víctima Brenda Giles, la joven que sufrió un disparo en la cabeza y el robo de su auto. Tras el compromiso del funcionario provincial de enviar 100 efectivos policiales y 25 móviles a la ciudad de San Lorenzo, el bloqueo de la autopista quedó sin efecto.
Sin embargo, Corach aseguró este lunes que evalúan iniciar acciones legales contra el intendente Leonardo Raimundo por el corte de la autopista Rosario – Santa Fe: “Lo estamos hablando con el fiscal de Estado Rubén Weder, claramente ha incurrido en un delito y vamos a ver qué actuación vamos a hacer”, aseguró en declaraciones a Radio 2.
El funcionario aseguró que hubo una “sobreactuación” por parte del mandatario sanlorencino y relató que “el sábado al mediodía me hice presente porque me instruyó el gobernador (Omar Perotti). El ambiente no era de lo más placentero y no puedo dejar de pensar en una sobreactuación”, indicó.
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