El sindicato de Trabajadores Aceiteros del Departamento San Lorenzo (SOEA) denunció ante el Ministerio de Trabajo, que un grupo de empresas agroexportadoras llevan adelante un lock out y que han resuelto frenar las operaciones de procesamiento de grano o poroto de soja. Una «maniobra extorsiva e ilegal», según afirman desde el gremio que pretende presionar al gobierno nacional y a la vez quitarle derechos a los trabajadores.

Mediante una carta firmada por el secretario general del sindicato, Pablo Reguera y patrocinado por el estudio de abogados del gremio, se presentó una carta al secretario de trabajo de la Nación Marcelo Bellotti en la cual denuncian maniobras por parte de un grupo de empresas que integran la paritaria que negocian con aceiteros para «especular» y presionar al gobierno.

Las agroexportadoras «manifiestan en forma errónea que ha sido una mala cosecha, que los precios del mercado no son competitivos y que solo han perdido ingresos. Dicho poroto o grano es destinado a la elaboración de aceite y sus derivados, siendo destinado en casi su totalidad a la exportación y una parte al biocombustible ya que éste, es utilizando en su corte es un 10% para combustible de gasoil. Esta situación genera la violación de los principios rectores del derecho laboral cuanto a la legislación negocial de Índole colectiva», señalan desde el gremio aceitero.

» La cosecha en comparación a la producción, ha sido muy alta, lo que nos lleva al hecho incontestable de que la cosecha se reserva, detiene y “congela” (hipotéticamente hablando) en una especulación espuria que no se vuelca a la producción. Las “aceiteras”como una parte de todo el complejo agro productivo y agro exportador se han literalmente “sentado sobre las semillas” a presionar al gobierno en el marco de pretensiones devaluatorias y utilizan el sufrimiento y el trabajo de nuestros representados como herramientas de presión y como variable de ajuste de sus juegos de ruleta».

En ese sentido, el sindicato plantea con números que el precio de la soja en el mercado de Chicago superó los 400 dólares y llegó al nivel más alto en 4 años. A su vez, a través del decreto 790/2020 en la primera semana de octubre el gobierno redujo dos puntos la alícuota de derechos de exportación para derivados de soja, con lo que reinstauró el histórico diferencial para los derivados respecto a los granos, para estimular así su procesamiento y acelerar el ingreso de divisas, lo que implica una transferencia de magnitud desde el fisco hacia el sector. La cosecha de soja del 2020 superó los 49,6 millones de toneladas y fue la séptima mejor campaña de los últimos 20 años, según un informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.

«Tales acciones y su gravedad debe ser entendida en el actual contexto de la pandemia generada por el covid -19 que azota a la Argentina y al mundo y siendo que los trabajadores afectado han sido declarados esenciales y que las empresas no han dejado de ganar dinero en ningún momento, pero los trabajadores esperan el fruto de su esfuerzo, de su trabajo y de su exposición al riesgo que la empresa incontestablemente utiliza para hacerse cada vez más rica», afirman.

«Este Lockout Patronal genera un daño inexcusable en las familias de nuestros representados y en la economía nacional ya que el producto se exporta en casi en su totalidad, y el 85% de la exportación del país se despacha por los puertos que se
encuentran bajo nuestro ámbito de aplicación. Nada de ello parece importar en la búsqueda implacable de convertir a los trabajadores en la variable de ajuste para maximizar las ganancias»

En ese contexto, se genera un gran malestar por una puja en las negociaciones por un bono extraordinario de 15 mil pesos que solicita el sindicato para los trabajadores que nunca se han detenido durante la pandemia del coronavirus, y que sigue dilatándose, ante ofertas insuficientes por parte de las empresas.

«Asimismo la maniobra desplegada se da ante el rotundo fracaso de las negociaciones que mantuviéramos de buena fe, durante los últimos 45 días, en donde estas patronales inescrupulosas extorsivamente sujetan el reconocimiento de los mayores esfuerzos riesgos y gastos que los trabajadores esenciales han sufrido durante estos meses de actividad y cuyo reconocimiento se impone a una inaceptable negociación a la baja de la recomposición salarial de los salarios que surgen de nuestro Convenio Colectivo de Trabajo, y se pretende debatir también a la baja sobre los derechos adquiridos por nuestro colectivo gremial respecto de la gratificación anual extraordinaria y su forma de cálculo, actualización y asignación por categoría funcional».

«Es por todo ello y teniendo por objetivos el cese inmediato de la maniobra extorsiva e ilegal que denunciamos, y el respeto del derecho al trabajo como derecho fundamental, es que solicitamos su inmediata intervención, caso contrario no podremos asegurar la paz social oportunamente comprometida», finalizaron desde el sindicato.