En medio de la angustia y de la desesperación del papá del jugador Emiliano Sala, un vecino, tuvo un gesto de solidaridad y de grandeza decidió acercarse y llevarlo hasta su casa, ubicada en Progreso, un pueblo de 3000 habitantes, en el oeste de Santa Fe.

Horacio Sala, estaba en soledad, atravesando el mayor de los dolores, al enterarse que su hijo Emiliano, desapareció en un vuelo que iba a Cardiff, donde iba a incorporarse como nuevo jugador del equipo Cardiff City. Horacio es camionero y se encontraba en la playa de Vicentín en Ricardone cuando las noticias comenzaron a llegar.

Las cámaras de televisión de Canal 3 mostraban su rostro desencajado, sus ojos rojos de tanto llorar, mientras hablaba por teléfono, completamente solo, y nadie de la planta se había acercado a sostenerlo.

Hasta que Maximiliano González, un vecino de Ricardone vio la desoladora imagen por la pantalla del noticiero de 12 a 14 y tuvo la grandeza de acercarse hasta la planta de Vicentín ubicada sobre la ruta A012.

Maxi, se comunicó a la empresa telfónicamente, y desde la planta desconocían la situación, por lo que el joven, les pidió si el hombre podía dejar el camión en la planta para  volver a su casa, en la localidad de Progreso. No estaba en condiciones anímicas para hacerlo, pero Horacio no quería dejar el camión en el lugar, temía perder su herramienta de trabajo.

Maximiliano, se comunicó con familiares de Horacio y acordaron que el joven lo llevaría con su vehículo hasta una estación YPF en La Ribera, donde un familiar del hombre lo esperaría para llevarlo con su familia, y así fue como el joven acompañó al padre del futbolista, quien no estaba en condiciones de poder manejar.

Horacio dejó el camión en la estación de servicio, y un familiar pasó a buscarlo. Intercambiaron con Maximiliano unas palabras, el hombre estaba devastado e intercambiaron sus números de teléfono para seguir en contacto.

Un gesto de solidaridad en el medio de tanto dolor.