General Motors, que produce la Chevrolet Tracker en General Alvear, Santa Fe, ha anunciado un programa de retiros voluntarios con el fin de desvincular a aproximadamente 300 empleados. Este programa estará disponible hasta el 31 de enero, y se implementa debido a la expectativa de una reducción de la producción.

Aunque la empresa aún no ha emitido declaraciones oficiales, se ha informado que los trabajadores de la planta que están bajo convenio pueden optar por este plan hasta la fecha límite mencionada.

La razón principal de esta medida es la proyección de una disminución del 50% en la producción para 2025 en comparación con 2024, lo que implica que GM planea fabricar la mitad de los vehículos del año anterior, aumentando así la capacidad ociosa del complejo industrial.

Este plan tiene como objetivo “retirar” a 300 operarios y reducir el personal sin generar conflictos laborales significativos en la planta.

La Tracker producida en Alvear se destina exclusivamente al mercado argentino y también se fabrica en Brasil, lo que impide su exportación a ese país, el mayor cliente de las automotrices locales.

Este SUV se ha quedado como el único modelo en la planta tras la discontinuación del Cruze, un vehículo argentino muy exitoso que perdió popularidad debido a un cambio en las preferencias de los consumidores, quienes han optado por las compactas SUV en lugar de los hatchbacks y sedanes medianos.