En un sorpresivo giro en la causa por el homicidio de Omar Pereyra, hoy se llevó adelante una audiencia imputativa contra Luis González, a quien el fiscal Lucente lo acusó de amenazado a un hombre identificado como Samuel C., para que vendiera estupefacientes para ellos. El delito atribuido fue amenazas coactivas calificadas en carácter de autor. Sin embargo, el fiscal, no encontró aún evidencias para imputarlo por el homicidio de Pereyra porque un testigo fundamental declaró falsamente.

Pero también Brisa Pruyas, había sido imputada por homicidio agravado por el crimen de Omar Pereyra ocurrido el pasado 23 de octubre en Cantoia y Vergara aproximadamente 20.25 horas cuando la víctima custodiaba un búnker de drogas. En esa audiencia el fiscal Lucente le atribuyó a la mujer de 24 años, haber estado en un Chevrolet Oscuro en la parte trasera, mientras Luis González conducía y otro hombre apodado «Ratita» iba en lugar del acompañante, de haberle disparado a Pereyra provocándole la muerte por hemorragia masiva de un disparo que ingresó por el abdomen. El juez Cattáneo había dispuesto prisión por el plazo de ley a Pruyas, una mujer que dijo no tener trabajo y que es ama de casa.

El fiscal Leandro Lucente, había sostenido la imputación en base al testimonio de SC., quien aseguró haber visto a las tres personas a bordo de un automóvil oscuro disparar hacia donde estaba Pereyra. También reveló que ya habían tenido amenazas y disparos frente al lugar días atrás y que habían sido ellos los autores.

Sin embargo, cuando Luis González., iba a ser imputado por el hecho de homicidio, el testigo, dio vuelta su declaración y confesó que había mentido, que no vio a Pruyas, ni a González ni a Ratita dispararle a Pereyra, sino que vio la parte trasera del vehículo, pero como a él lo habían amenazado días atrás, el estaba convencido de que se trataba de ellos. Al no tener suficiente evidencia, Pruyas fue liberada el viernes, pero sigue imputada en la causa de homicidio.

Nueva imputación

Este mediodía, Pruyas alias Pochi y González de oficio albañil, se enfrentaron a otra imputación: amenazas coactivas calificadas por el uso de arma de fuego, la mujer como coautora, y el hombre como autor.

Según los hechos, en abril de 2024 cerca de las 18 horas Pruyas y González junto a otro hombre apodado «Ratita» que aún no fue localizado se dirigieron en un vehículo tipo remisse hasta el domicilio de Vergara y Cantoia donde vive Samuel C.. Los tres descendieron del vehículo y se dirigieron a pie, y Luis González ingresó a la vivienda con un arma de fuego tipo revólver calibre 32 y con una mano lo tomó en el cuello, mientras que con la otra lo amenazaba con el arma, diciéndole que siga vendiendo para ellos, sino le iban a tirotear todos los días la casa y lo iban a correr de ahí. Cuando salieron de la vivienda Brisa le dijo » ahora te voy a mandar a los pibes», se subieron al remisse y se retiraron.

Luego, el 18 de octubre de 2024 cerca de las 15.30 hs, iban en una motocicleta color negra 110 cc, hasta calle Vergara y Cantoía donde vive S C., y lo amenazaron nuevamente de que siga vendiendo estupefacientes sino le iban a secuestrar a su hijo de 8 años, que lo iban a matar y que no lo iban a ver más, para luego irse.

Brisa Pruyas declaró ante la jueza Griselda Strólogo, que no conoce a ninguna de las personas que el fiscal está nombrando, y que no tuvo nada que ver con lo que dice el fiscal, como tampoco al que la denunció y volvió a referir que viven en barrio 2 de abril, aunque al principio se presentó como oriunda de Puerto San Martín.

En cuanto a la medida cautelar, hubo un acuerdo entre la Fiscalía y las defensas de los imputados, el Dr. Marcelo Alcácer por Pruyas y Carlos Varela por González de definir una prisión preventiva por 30 días con vencimiento el 4 de diciembre.

Lucente aclaró que en un primer momento ambos fueron detenidos por el hecho de homicidio, Pruyas si había sido imputada y con prisión preventiva, pero que no llegó a imputarse a González porque S C., fue quien los individualizó y apuntó como tiradores del hecho frente a su domicilio donde funciona un búnker donde muere Pereyra, pero el viernes pasado reconoció que había mentido y que no los vio tirando sino que vio la parte trasera del automóvil, pero que estaba seguro de que eran ellos porque ya los habían amenazado a él y al fallecido Pereyra.

El Fiscal desistió de imputarlo porque aún no hay elementos suficientes para hacerlo respecto al homicidio, pero que la investigación continúa; pero hay elementos para imputarlo por las amenazas.

El fiscal insistió que Pruyas es pareja de David Monzón, lo que la mujer también confirmó, pero Lucente agrega que Monzón desde la cárcel de Coronda donde esta detenido da órdenes relativo al comercio de estupefacientes y que le pide a su pareja que borrara los mensajes a través de Facebook. Todos estos hechos están ocurriendo en un contexto de comercio de estupefacientes y de extrema vulnerabilidad porque en el lugar donde murió Pereyra hubo disparos el 14, 16 y 17 de octubre.

La jueza Griselda Strólogo homologó el acuerdo entre partes otorgando la prisión preventiva hasta el 4 de diciembre.

Samuel C fue detenido por falso testimonio, pero hoy fue liberado con restricciones, en una audiencia que se realizó con posterioridad. Se lo imputó por haber brindado ante la PDI, información falsa sobre el homicidio de Pereyra individualizando a Pruya, González y Ratita como los que iban en el automóvil y que disparan entre ocho a nueve veces dándole muerte. El delito atribuido fue Falso testimonio y delito contra la administración pública. El fiscal solicitó la prisión preventiva por 30 días.

La Defensa del imputado, los abogados Daniel Machado y Alejandro Caniglia se opusieron a la prisión preventiva y en su lugar solicitaron se disponga la inmediata libertad de su cliente bajo el cumplimiento de las siguientes reglas de conducta 1) Fijar domicilio en otra localidad, previa constatación policial respectiva; 2) Constitución de garante personal, 3) Firma semanal en O.G.J de Rosario; 4) Caución real de $100.000-

La jueza dio lugar a lo solicitado por la Defensa y agregando otras reglas de conducta como Prohibición de portar cualquier tipo de arma; Promesa jurada de someterse a proceso; Prohibición de ingresar a la localidad de San Lorenzo.