En diálogo con Pregón, el histórico dirigente hizo un repaso por la causa judicial que lo tuvo detenido, el presente y el futuro de la empresa, la política, sus enemigos y su certeza de volver a ocupar el sillón presidencial de la Cooperativa. Señaló que hoy la cooperativa es un caos, que en el puerto no hay orden y que él es el único capaz para normalizar la situación.

Herme Juárez asegura que el gobierno de Mauricio Macri le armó la causa que lo tuvo detenido preso en la cárcel de Ezeiza por 20 días.  “Se querían quedar con la Cooperativa, que nosotros desapareciéramos y ellos hacerse cargo.  Armaron una causa tremenda que si no hubiera tenido buenos abogados todavía estaría preso, aunque ahora las cosas hubieran cambiado porque ganó el peronismo y ahí hay un cambio fundamental de las decisiones”.

“La Cooperativa es atractiva porque es el primer puerto de Argentina y del mundo por la cantidad de toneladas que se cargan. Esa riqueza la cargan los estibadores, es un volumen continuo que ellos lo que querían era quedarse con el puerto”, afirmó. 

En relación a la acusación de que él imponía las tarifas en dólares a las empresas  y que tenía el monopolio de la estiba Juárez aseveró que “nunca impusimos la tarifa” y relató: “Yo iba y negociaba con todas las empresas en una mesa. No es un monopolio, nosotros somos los mejores. ¿Quién tiene 300 máquinas Volvo que cuestan 300 mil dólares cada una? Y ¿para qué invertimos? Para hacer servicios a las empresas”. En este sentido, aseguró que desde que está la intervención, “mandada por Macri”, se ha perdido mucho trabajo. “Y ahora tenemos que reconquistarlo otra vez, porque esos trabajos yo los había manejado y lo había charlado con los empresarios. Hoy hay problemas en el puerto, no hay gente para trabajar. Se ha perdido el respeto del puerto y no hay nadie que  comande, el único que puede comandar soy yo, y los empresarios lo saben y el gobierno también lo sabe. Y saben que si yo vuelvo a ese lugar, normalizamos la situación del puerto, porque es una vergüenza lo que está pasando”.

El pasado 4 de junio un grupo de trabajadores impidió la entrada de Herme Juárez a la sede del Sindicato de Portuarios y en relación a esto, afirmó:  “Tendrán que responder a la justicia, está  todo filmado, los insultos. Yo fui a recibir insultos, porque nadie me presentó una propuesta, nada, un grupito minúsculo, piquetero, que fueron a levantar a la gente para que me insultara y me faltara el respeto, cuando yo les he enseñado el respeto a ellos, cómo se tiene que dialogar, cómo se tiene que hablar, porque esta es una gran familia que habíamos armado nosotros, principalmente yo”.

Una de las acusaciones que apuntaron los trabajadores  ese día era que Juárez se había quedado con dinero de los estibadores: “Cuando se fue el interventor Juan Schaer dijo que era un ejemplo la Cooperativa y lo siguen diciendo todos. Somos un ejemplo a nivel nacional. Otra cooperativa como esta no hay. Pasa que han aprovechado tres o cuatro que estaban escondidos en el puerto hoy aparecen haciendo este desastre. Porque la culpa no la tienen todos los estibadores, son tres o cuatro que están agitando a la gente. Los que estuvieron en contra son los que estaban en contra cuando estaba yo, pero estaban escondidos, ahora aparecieron. Y vino bien todo esto. Ahora se aclaró el panorama, tomábamos café antes y ahora perjudican, no a mí, sino a la gente trabajadora de la cooperativa”.

El dirigente describió el presente de la Cooperativa como “caótica”: “Estando yo en la cooperativa, las cosas se van a arreglar. Para mí es un placer estar como presidente, hace cincuenta años que lo hago y yo estoy entero para seguir peleando por la gente”.

Según relató Juárez los próximos pasos hacia la normalización de la empresa serían la llegada de un nuevo interventor, que llame a elecciones y se realicen. Él va a encabezar una lista, que aseguró lo llevará a su sillón nuevamente. Y aseguró que no tendrá oposición en el acto eleccionario: “No va a haber nadie, no pueden armar una lista, lo que han  hecho es  un atropello, aprovechándose de los buenos estibadores  y no tienen ni candidatos, no tienen cabeza. Se perdieron en el camino los que los seguían. La situación es que la gente me apoya a mí porque se dieron cuenta que ellos les han mentido, mintieron totalmente”. Y agregó: “El sillón me corresponde por los años que tengo. Porque toda esta cooperativa la he pensado yo, la he hecho yo, más allá de que les he administrado los dineros a los trabajadores. En abril de 1969 me hice cargo de esta cooperativa, hice el primer balance a papel y lápiz y así sucesivamente. Las cosas están bien, no encuentran una moneda de diferencia. No me van a encontrar nada porque yo he venido a hacer crecer a los seres humanos que están en la cooperativa. Yo he estado durmiendo en la cooperativa sobre un colchón de dinero y sin embargo, jamás le toqué un peso.”

Juárez aseguró no haberse molestado con el show  mediático que se hizo de su detención en agosto del año pasado cuando medios nacionales e internacionales publicaban su mansión, cajas fuertes con mucho dinero y hasta lingotes de oro: “No me molestó nada porque yo soy totalmente transparente y sano así que eso era mentira y se iba a aclarar. A mí no me van a encontrar absolutamente nada, soy totalmente blanco, en el banco, en todos lados. Porque yo cumplo con la enorme responsabilidad de manejar una cooperativa tan importante”.

De sus días en la cárcel manifestó haberlo pasado “bárbaro”. “Pelaba papas, cocinaba, picaba la carne. Ahí éramos todos hombres, peronistas gracias a Dios y cocinábamos  un día cada uno. Éramos todos compañeros y amigos en el pabellón. A De Vido y a Boudou los veía y charlábamos cuando salíamos al patio.”