La Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo intimó al Gobierno nacional a respetar los convenios colectivos preexistentes.

La Justicia le puso un freno a la motosierra de Javier Milei, que no podrá ejecutar los 3.155 despidos en la ex AFIP y en la Aduana, los cuales habían sido anunciados hace tres meses por su vocero presidencial, Manuel Adorni. Así surge a partir del fallo de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, que intimó al Gobierno nacional a respetar los convenios colectivos preexistentes.

La Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, en la causa “Asociación de Empleados Fiscales e Ingresos Públicos (AEFIP) y SUPARA c/Poder Ejecutivo Nacional y otro s/medida cautelar” Expte. Nº49614/2024, resolvió hacer lugar a la medida cautelar solicitada en conjunto por AEFIP y SUPARA, ordenando al Poder Ejecutivo y al Organismo Recaudador se abstengan de adoptar cualquier acción que contraríe o violente la garantía de estabilidad prevista en los respectivos Convenios Colectivos de Trabajo de ambas organizaciones gremiales.

Esta medida cautelar, habia sido solicitada días posteriores al vencimiento de la conciliación obligatoria que se dictó en el marco del conflicto gremial desatado por los anuncios oficiales del Gobierno Nacional que generaron una gran conmoción entre los trabajadores del Organismo.

En el pronunciamiento, los jueces reconocieron la legitimidad de la representación colectiva de las entidades gremiales, la pertinencia del reclamo en el Fuero Laboral y el peligro inminente de despidos masivos.

Es un fallo histórico, donde la justicia actúa en resguardo de la garantía constitucional y convencional de la estabilidad en el empleo de nuestros representados.

Es una sentencia que también representa un mensaje y una clara enseñanza para aquellos que convocan a acciones sectarias e inconducentes, que solo contribuyen al debilitamiento o fragmentación de la unidad, única garantía de una eficaz acción colectiva.

“AEFIP y SUPARA hemos puesto siempre como prioridad la protección de la fuente de trabajo y nuestra estabilidad como empleados públicos. Sin ella sería imposible defender todos los demás derechos convencionales y esto es posible con coherencia, organización y unidad para seguir enfrentando todos los desafíos que se avecinan”.

La semana pasada ese al compromiso asumido por el nuevo director ejecutivo en nuestra primera reunión, avanzó con medidas sorpresivas, publicadas en el Boletín
Oficial, sin comunicación alguna con las organizaciones gremiales. La falta de diálogo va configurando un estado de crisis que altera la Paz Social, la productividad y profundiza los conflictos.

UNA INACEPTABLE POLÍTICA EN CONTRA DE NUESTROS SALARIOS
“Durante el 2024, la caída de la economía y el PBI no impidieron que los trabajadores Fiscales y Aduaneros cumplamos, superando las metas de recaudación, operativas y en tiempo récord desarrollando todos los instrumentos que dieron sostén al Blanqueo y al paquete fiscal”, aseguraron desde los gremios.

Como resultado de ello el Gobierno obtuvo ingresos extraordinarios con los que sostiene su plan económico.
Pese a ello desde marzo tenemos congelado el sueldo, una primera rebaja de nuestro Fondo en junio, la reinstalación del impuesto a las ganancias en Julio y hoy nuevamente otra dura rebaja de la alícuota del Fondo de jerarquización, con el cual van a financiar el anunciado plan de retiros voluntarios.