El sector portuario se mostró en alerta por una nueva bajante del río Paraná que perjudica el tránsito de buques de carga por la Hidrovía donde la histórica bajante que ocurrió el año pasado puede volver a repetirse.

“La salida de buques de carga por la Hidrovía se encontrará limitada a unos 30 pies durante todo este año debido al bajo nivel del Río Paraná. Los buques que normalmente se despachan a unos 34,06 pies de profundidad se están despachando a unos tres pies menos”, señaló Guillermo Wade, gerente de la Cámara de Actividades Portuarias y Marítimas (CAPYM). Este problema perjudica económicamente la exportación de granos y productos agroindustriales, porque los buques están obligados a cargar menos para poder navegar por el Paraná hacia el Atlántico, según precisaron desde la entidad.

“Los registros comparados revelan que este es el cuarto año consecutivo en el que se registran precipitaciones menores a las normales a lo largo de toda la cuenca, desde las nacientes: el Paranaíba, el Grande, el Paraguay. Las represas en Brasil este lunes estaban en el 42 promedio de embalse. Por su parte, Yacyretá, que en enero pasaba 13.000 metros cúbicos por segundo de agua, viene bajando hasta los 6000”, precisaron.

La perspectiva no es buena y en plena cosecha gruesa complica la navegación y se espera que en mayo la bajante continúe: “Los niveles siguen y seguirán bajando, debido a que a partir de ahora se ingresa en un período de bajas precipitaciones hasta diciembre”, afirmó Wade-