La jueza Griselda Strólogo prorrogó por 60 días la prisión preventiva de Diego Quintana, acusado de haber abusado de sus sobrinas cuyas edades estaban entre 12 y 14 años y 16 y 17 años en el momento de los hechos en Andino. Según las denuncias, los abusos se produjeron de manera reiterada en momentos en que las víctimas quedaban a solas con él en su hogar.

 Un grave caso de abusos sexuales contra dos menores de edad conmociona a la localidad de Andino. Diego Andrés Quintana, fue denunciado por haber agredido sexualmente a sus dos sobrinas en distintos períodos entre 2016 y 2020, aprovechando su posición de autoridad como responsable de su cuidado.

Según la investigación, Quintana habría abusado de C (entre 16 y 17 años en ese momento) entre 2016 y 2017, y de M (de 12 a 14 años) entre 2019 y 2020. Los ataques ocurrieron en múltiples escenarios:

En su domicilio  cuando su esposa no estaba presente, en el auto, mientras las trasladaba a la escuela o a su casa y en la vivienda de las víctimas, durante visitas o noches que pasaba allí.

Entre las conductas denunciadas figuran besos forzados, tocamientos en zonas íntimas y obligar a las menores a tocar sus genitales.

Calificación Legal

El fiscal a cargo del caso determinó que los hechos encuadran en el delito de “abusos sexuales gravemente ultrajantes”, agravado porque Quintana era “persona encargada de la guarda” de las jóvenes (artículo 119 del Código Penal). Esto implica una responsabilidad penal reforzada, con penas que podrían superar los 10 años de prisión.

Las víctimas, ahora mayores de edad, habrían presentado pruebas testimoniales y forenses para sustentar la acusación. El caso avanza hacia la etapa de juicio, donde se definirán las responsabilidades penales.

 Consultado por este medio, el abogado de la querella, Daniel Machado destacó que la gravedad radica en la reiteración de los actos y el abuso de confianza familiar, factores que la Justicia suele considerar para imponer condenas ejemplares.

“Si la fiscalía y la querella presentamos la acusación, automáticamente se prorróga la prisión preventiva hasta la audiencia preliminar. La jueza observó que no se modificó ninguna cuestión de los hechos, ni la Defensa ningún elemento nuevo que lo desincrimine, como para morigerar o dar la libertad como se había pedido”, agregó Machado

La Defensa ofreció una fianza de un millón de pesos, que fue rechazada ya que los hechos son abusos intrafamiliares, repetidos en el tiempo, con las edades, una de las víctima entre los 2 y los 14 años y la mayor entre los 16 y 17. Además falta realizar una cámara gesell a la menor de ellas.

“Atento a esas consideraciones, también la pena en expectativa, la apariencia de responsabilidad que se mantiene y demás, consideró prorrogar justamente con este cargo de presentar la acusación y ahí prorrogarla automáticamente hasta la preliminar”, concluyó el letrado.