El Gobierno Nacional está evaluando una serie de medidas para reformar el sistema de subsidios en los servicios públicos, específicamente en el ámbito de la electricidad y el gas. Una de las propuestas más destacadas es la eliminación de las contribuciones para aquellos propietarios de vehículos motorizados, ya sean motos o autos, que hayan adquirido sus vehículos en los últimos cinco años.

Esta iniciativa, impulsada por el Gobierno de Javier Milei busca reducir el gasto público y mejorar la eficiencia en la asignación de recursos estatales. La idea es revisar los criterios de elegibilidad, de modo que aquellos que posean vehículos nuevos se excluyan del beneficio. Esta medida se presentará en las próximas audiencias públicas programadas para el 29 de febrero, donde se discutirán los detalles y posibles implicaciones de la propuesta.

Hasta ahora, el criterio establecido para la exclusión de los subsidios era la propiedad de tres o más vehículos motorizados nuevos, lo que clasificaba a los hogares en el nivel más alto de ingresos. Además, se considerarán otros criterios patrimoniales, como la propiedad de aeronaves, embarcaciones o múltiples propiedades, para determinar quiénes pierden el beneficio.

Es importante destacar que el Gobierno intervendrá para proporcionar asistencia adicional en casos de «pobreza energética», definida como aquellos hogares que destinan más del 10% de sus ingresos al pago de servicios de electricidad y gas. Se implementarán mecanismos para garantizar la transparencia en la asignación, incluyendo la validación de datos cruzando múltiples fuentes de información.

Se espera que estas reformas reduzcan significativamente los subsidios energéticos este año y se implementen en mayo. Aunque la mayoría de los usuarios de la red eléctrica seguirán recibiendo contribuciones, estas medidas representan un esfuerzo por optimizar el uso de los recursos públicos y garantizar que la ayuda llegue a quienes más lo necesitan.