Una pasajera vivió un grave acoso en el colectivo Expreso por un hombre

Un hombre se masturbó al lado de ella, y lo hicieron bajar del colectivo en la zona de Baigorria. Al día siguiente fue visto por otra pasajera que lo reconoció del día anterior.

Una mujer sufrió un momento de terror en el colectivo Expreso cuando un hombre se sentó a su lado y comenzó a masturbarse. El hecho ocurrió el jueves a las 10.30 h en la zona de Granadero Baigorria y al día siguiente volvieron a verlo, señalando que es frecuente que el acosador utilice el servicio de pasajeros.

La joven que tomó el colectivo en la zona de la terminal, relató a Pregón que este hombre se encontraba fuera de sí, “estaba raro, no estaba normal, lo ignoré, pero en la zona de Baigorria, cuando lo miro de reojo y veo que se estaba tocando mientras me miraba, me doy vuelta para mirarlo se hizo el distraído, que se dormía. Lo miraba para ver que hacía, y nada”, contó Justina.

A los minutos, la joven que se había colocado los auriculares pero sin sonido para observar que hacía, comenzó a escuchar que le susurraba cosas al oído ” qué hermosa que sos, me dice, le dije si tenía algún problema que lo estaba escuchando, y le dije que se bajara”. El hombre se va hasta atrás, toca el timbre, y los pasajeros notan esta situación y le dicen al colectivero, quien le cierra la puerta.

“Querían que espere un patrullero y dije que no, en esta circunstancia no pude ir a la comisaría, además sabía que me iban a decir que el hombre estaba drogado, por lo que dije que no que sólo se baje y que siga el recorrido”, señaló la joven.

Otra mujer, que había estado en ese servicio de transporte, volvió a verlo al día siguiente y los pasajeros aseguran que es normal que circule en el colectivo entre la zona de la Terminal de ómnibus de Rosario hasta la zona de Capitán Bermúdez. “Entró en pánico al volverlo a ver, luego de que se haya masturbado el día anterior frente a otra chica. El hombre sube en la Terminal, y baja antes de llegar a San Lorenzo”, relató la mamá de la segunda joven que lo vio el viernes.

El agresor, mide aproximadamente 1.50, de contextura robusta, utilizaba zapatillas mostaza marca Adidas, cabeza rapada con tantuajes en el antebrazo derecho tipo animé. “Sabe lo que hace, porque él decía que no hacía nada y que lo dejen ir”.

Según el relato de otros pasajeros, este hombre posee un pase de discapacitado, pero suele acosar a chicas en el colectivo Expreso y que cuando lo advierten, dice que no comprende porque es discapacitado.

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