Luego de conocerse que Vicentin había vendido el 16% de la firma de biodiésel Renova -que tiene en joint venture con Glencore- en el mercado se especuló con la posibilidad de que la empresa ahora contaba con la liquidez necesaria para salir del default. Pero, en pocas horas la agroexportadora lo negó e incluso ratificó que por el momento no tiene un plan de pago concreto para sus acreedores.

En una primera instancia algunos medios informaron erróneamente que Vicentin había vendido parte de su gigante estructura a la multinacional Glencore. Y justamente la firma de capitales nacionales salió a desmentir en un comunicado que lejos de achicar su operatoria, sólo había ejecutado la venta de una parte de Renova.

En este contexto emitió un comunicado en el que detalla que “la venta parcial de nuestra tenencia accionaria en Renova, ha sido el resultado de negociaciones que tuvieron inicio tiempo antes de las circunstancias informadas a la Bolsa de Comercio de Rosario y fue contratada también con anterioridad a nuestro comunicado de fecha 6 de diciembre de 2019”.

Es decir, Vicentin había vendido parte de Renova antes de entrar en default y por ahora no está en sus planes ponerle cartel de venta a ninguna otra de sus operaciones.

A la par, desde la empresa también echan por tierra las versiones de que lo recaudado de la venta accionaria sería para cancelar deudas y así lo detallan en un comunicado: “También señalamos que el producido de la venta indicada fue aplicado en tal oportunidad a atender obligaciones del giro de la sociedad, lo que ratifica que el empeño de Vicentin -como hemos comprometido- pasa por restablecer su estructura operativa, defender sus activos industriales, sus fuentes de trabajo y honrar sus obligaciones, priorizando la reanudación de nuestro flujo de trabajo con los productores”.

El plan pagos todavía sigue sin aparecer en escena luego de dos semanas de la comunicación del default. Pese a la intimación de sus acreedores, la empresa volvió decir que trabaja en el tema.

“No estamos ahorrando esfuerzos para que la superación de esta coyuntura empiece a tener lugar en el más pronto plazo. Tal plan integral, como hemos hecho saber, será comunicado a productores e interesados, inmediatamente de terminar su elaboración”, cierra la compañía que acumula actualmente deudas totales por alrededor de u$s1.000 millones, de los cuales más de u$s350 millones es con productores que le vendieron commodities.