Hace varios meses que una ola de robos azota a la apacible villa. Tanto las casas de fin de semana como las de los vecinos de residencia permanente, son blanco de delincuentes que llegan al lugar. Este domingo se produjo un hecho de robo en un conocido comercio y gracias al accionar de los vecinos lograron aprehender a uno de los malvivientes.

Un violento episodio se vivió durante la tarde de este domingo en Villa La Ribera cuando delincuentes entraron a la Casa de Pesca y redujeron a la propietaria llevándose dinero.

Alarmados por la situación, un vecino del comercio salió a perseguir con su camioneta el auto donde escaparon los malvivientes y cuando se bajó para correrlos, quisieron llevarse la Eco Sport, a la que en el frenesí de la huída, chocaron contra un árbol. Por el accionar mancomunado de los vecinos, lograron aprehender a uno de los delincuentes hasta la llegada de la Policía.

Este no es un hecho aislado, hace varios meses que la tranquilidad se ha ido de la agradable villa por la presencia de malvivientes que se ocupan de entrar y desvalijar las casas de fin de semana, pero también le roban la paz a los vecinos que tienen allí su residencia permanente.

Uno de los hechos que conmocionó la tranquilidad habitual este fin de semana, fue el atraco a un pintoresco complejo de cabañas que se encuentra próximo a la estación de peaje de Villa La Ribera, lindero a la autopista. Desconocidos entraron y desvalijaron completamente las cuatro edificaciones, provocando importates daños.

El día anterior, una de las casas cercanas a la Capilla Nuestra Señora de Lourdes fue blanco de delincuentes que a pesar del sistema de alarma del lugar, cortaron alambres, rompieron candados y entraron a hacer de las suyas por cuarta vez. Y así, los hechos se repiten en diferentes viviendas.

Los vecinos se sienten totalmente desprotegidos, ya que a pesar de las denuncias que realizan en la Comisaría de Andino, nadie les da una respuesta a las inquietudes que los aquejan. Se mantienen conectados a través de un grupo de whatsapp ya que no les queda más remedio que cuidarse entre ellos.