Investigadores del INTA y el Conicet en Santa Fe han desarrollado un sistema de recirculación acuícola bajo un invernadero, que permite la cría exitosa de peces durante el invierno. Este avance supera los desafíos de bajas temperaturas que complicaban la cría del pacú, una especie muy demandada.

El sistema permitió una producción de 92 kg de pescado por pileta en un año, con un peso promedio de 684 g por pez. Inicialmente validado con tilapia azul, ahora se está probando con boga, una especie nativa.

El método utiliza un biofiltro donde bacterias nitrificantes transforman amonio en nitratos, reutilizando y recirculando el agua. Esto evita la necesidad de calefacción, permitiendo la cría en zonas periurbanas.

El sistema se adaptó a densidades de peces más bajas, utilizando invernaderos para mantener la temperatura. Esto extiende el período de alimentación de los peces durante el invierno, sin incurrir en altos costos energéticos.

Cada módulo tiene capacidad para 150 peces, permitiendo una producción de 100 a 150 kg de pescado. El diseño modular facilita la escalabilidad y se puede implementar en estructuras ociosas como gallineros o invernaderos en desuso.

Los módulos consisten en piletas de 10,000 litros y un biofiltro de 3,000 litros. La densidad de siembra fue de 15 peces por metro cúbico, logrando resultados prometedores en 12 meses.

Esta innovación promete transformar la acuicultura en regiones con climas templados, ofreciendo una alternativa sostenible para la producción de peces todo el año.