A pocas semanas de cumplirse un año del trágico fallecimiento de Emiliano, su familia insiste en exigir respuestas y justicia. Este viernes, la madre del joven tendrá una reunión con el fiscal Aquiles Balbis, quien ahora lleva la causa tras la licencia maternal de la fiscal anterior, Luisina Paponi.

“Nos dieron turno para el viernes a las 10 de la mañana. Espero que nos den más información, porque la verdad es que tengo muy poca claridad de cómo avanza la causa”, expresó la madre, visiblemente angustiada. Según explicó, las últimas novedades que recibió indican que finalizaron los análisis del teléfono de uno de los implicados, pero desde entonces no ha habido avances significativos.

El hecho ocurrió entre el viernes 12 y el sábado 13 de enero de 2024 , cuando Emiliano, que trabajaba a prueba en una empresa, salió de su turno nocturno para acompañar a un compañero a realizar una supuesta transacción de dólares. “Nos avisaron a la una de la mañana que no había vuelto. Desde ese momento, empezamos a buscarlo sin descanso”, recordó la madre.

Según la investigación de Fiscalía, el triple crimen fue ejecutado en el interior del domicilio de calle 13 de Marzo al 300 de Capitán Bermúdez, propiedad de Alexis Lobo cuando las víctimas Eber Ramos (25), Emiliano Saucedo (31) y Santiago Ochoa (25), se encontraban en el domicilio mencionado a los fines de realizar una transacción de intercambio de dólares y pesos. Allí fueron atacados con una maza de 3 kilos y con una cuchilla marca tramontina mango de madera causándoles de ese modo la muerte y apoderándose del dinero que llevaban.

En su relato, María Gabriela, madre de Emiliano Saucedo, describe cómo ella y otros familiares recorrieron la zona, preguntaron a conocidos y llegaron a la vivienda donde finalmente se concentraron las sospechas. “Mi nuera estaba segura de que algo le había pasado, no quería moverse del lugar. Vimos cosas que no cerraban, como la moto de uno de los acusados en el fondo del garaje”, relató.

La familia sospecha que Emiliano podría haber sido víctima de una emboscada, aunque todavía desconocen los detalles concretos de lo sucedido esa noche. “Mi hijo era una persona humilde, trabajadora, sin maldad. Fue inocentemente a acompañar a su compañero de trabajo y le quitaron la vida”, lamentó.

Por ahora, dos personas permanecen detenidas: Alexis Lobos y Luciano Palacios, pero la familia teme que la falta de celeridad judicial prolongue aún más el proceso. “Le pido a la justicia que apure. Ya va a pasar un año, y seguimos sin respuestas”, concluyó.

La reunión con el fiscal este viernes será clave para determinar si finalmente obtendrán información más clara sobre el estado de la causa y los próximos pasos en la búsqueda de justicia para Emiliano.