Este jueves 9 de enero a las 19 horas, se realizó una nueva marcha en la esquina de los bancos en bulevar Urquiza y San Martín. Bajo el lema “Hoy nos toca a nosotros. Ayúdanos para que, después, no sean los tuyos quienes enfrenten tanta injusticia”, los familiares de personas que están detenidas o cumpliendo condenas por abusos se unieron para reclamar por falsas denuncias que perjudican a sus seres queridosua que se consideran víctimas de un sistema judicial que, según ellos, condena sin pruebas y favorece a quienes realizan acusaciones infundadas.

Las familias involucradas en la marcha señalaron que el sistema judical permite que hombres inocentes sean injustamente acusados y encarcelados.

La marcha también persigue el objetivo de recolectar firmas de apoyo para apoyar la ley Alejo que aborda dos temas polémicos: identifica como violencia psicológica las falsas denuncias y el impedimento de contacto contra los hijos. Temas sumamente sensibles que se perciben en los tribunales en conflictos de divorcio. No hay ninguna estadística pública ni oficial para determinar estos abusos del sistema.

Alejo Oroño, un joven de 22 años, fue apuñalado en el pecho por su exesposa, madre de su pequeño hijo. Su tragedia ha puesto de manifiesto un tema tabú en nuestra sociedad donde los hombres también sufren violencia, pero muchos no se atreven a denunciarlo por vergüenza, como le sucedió a Alejo. Cuando finalmente decidió hacerlo, en la comisaría su denuncia no fue aceptada.

El proyecto pretende extender la capacitación obligatoria para el personal del Estado como prevista en la Ley Micaela, una línea gratuita de asistencia y comisarías especializadas capaces de atender y comprender las diferentes formas de violencia, desde la perspectiva de los diferentes géneros y la diversidad sexual.

Los casos más resonantes del cordón industrial y que movilizaron la convocatoria son los de Franco Díaz y Damián Cruz; el primero fue condenado a 8 años de prisión efectiva por abuso sexual y el segundo a 6 años por abusar a una menor de 13 años.

Condenaron a 8 años de prisión a un joven por abusar sexualmente de una menor de 17 años

“Nuestro caso arranca con una noche de boliche de los chicos y bueno, terminaron con un par de chicas que terminaron denunciando. Nosotros creemos que más allá de lo que pasó es una falsa denuncia, ya que por ahí las pruebas nuestras no sirvieron y el juez se lleva solamente por un relato que lo afirma una psicóloga. Tal y así que la revisación de la chica no se hizo, que para nosotros es la prueba fundamental”, relató el papá de Franco Díaz.

“Cuando hay un abuso sexual con acceso carnal, yo creo que la prueba es fundamental. Sin embargo, el juez se lleva por el relato que lo afirma una psicóloga que asevera que esto es cierto. Entonces nosotros queremos que nos escuchen, porque como la situación de Franco hay varias personas que todos sabemos que si no firman un abreviado son severamente condenados”, explicó

“Hay un gran porcentaje, si uno estudia todas las causas de los condenados, están todos condenados por no firmar abreviados. La mayoría están todos por abreviado, o sea, es como se maneja la fiscalía acá, porque ya realmente la connivencia que hay entre la fiscalía y los tribunales de San Lorenzo es ya insostenible. Se hizo un petitorio y se está juntando firmas a todo aquel que quiera o que pase por lo mismo para poder llevar y para poder sumarse a la ley Alejo”, agregó el hombre.

Por otra parte, Vanesa,en representación de su hermano Damián Cruz, el cual aseveran fue denunciado por una falsa denuncia de abuso sexual, “donde tenemos todos a nuestro favor, todas las pericias forenses contatan de que la supuesta denunciante no pasó por ningún abuso sexual, donde las paredes de su ano conservan el tamaño normal”, señaló la mujer.

“Nosotros siempre quisimos hacer esto, pero lamentablemente no nos animábamos, ya que la familia de la denunciante, junto a otra mujer, siempre nos amenazaron con armas de fuego, donde nos ven, nos tiran los vehículos encima”, agregó angustiada Vanesa.

 la Jueza de Primera Instancia Dra. Marisol Usandizaga resolvió condenar a Carlos Damián Cruz a la pena de 6 años de prisión efectiva por el delito de Abuso sexual con acceso carnal

El Fiscal Dr. Carlos Ortigoza le atribuyó haber abusado sexualmente de una menor de 13 años, en reiteradas oportunidades en el domicilio del acusado en la localidad de Capitán Bermúdez. Aprovechando una situación de confianza con la víctima.

Pero para la familia de Cruz “Tienen la costumbre ellos de hacer este tipo de denuncias, ya que ella denuncia a cinco personas. Su relato es que cinco personas, en diferentes días, abusaron de su hija. Nosotros hoy presentamos muchísimas pruebas, pero lamentablemente desde Fiscalía no nos dejan aportar las pruebas que tenemos”, señaló.

“Lamentablemente, se detiene a personas inocentes por el solo hecho de la palabra de la supuesta víctima, de la denunciante. Donde hoy no vale una pericia forense, donde solamente se le da lugar a la voz, a lo que dice la denunciante. Y hoy venimos a pelear por esto, para una igualdad también, de que haya una igualdad”, agregó.Porque así como verdaderamente hay mujeres que fueron abusadas, de este lado nos toca a nosotros, que verdaderamente hay personas inocentes, y venimos a aclamar y a reclamar por ello. Bueno, a Gianfranco hace ocho meses que lo detuvieron. Él había llevado un telegrama al correo argentino.

Magalí es hermana de Gianfranco a quien hace ocho meses lo detuvieron cuando fue a llevar un telegrama a correo argentino. “Ahí una persona empezó a los gritos y ahí lo detuvieron. Mi hermano, lamentablemente, tiene mucha presión porque él se siente mal ahí adentro en donde está. La verdad que nosotros como familia nunca nos íbamos a esperar que esto pasara”,

“Es todo la misma causa que la de Damián Cruz, porque la chica hizo tres denuncias con anterioridad. Lo único que, como no tenían fundamentos de esas denuncias, no prosperaron. Hasta que después fueron al juzgado, a una parte en Rosario, donde hicieron la ampliación de la denuncia. Y ahí ella denuncia a cinco personas. Una de las cuales quedó sobreseida porque señalaron que las relaciones fueron consentidas

La causa de Giangranco está en proceso y hace ocho meses que está detenido.

“Nosotros sufrimos escraches sociales. Incluso anoche nos escracharon. Un poco más me dieron nuestra dirección. La mamá de esta chica, yo soy preventista, trabajo en la calle. Me siguió una vez, me tuve que encerrar en un negocio porque me quería golpear. Hice una denuncia. Eso me consta la denuncia. Sufrimos amenazas en la casa de mi papá. A mi papá lo amenazaron de muerte”

“Ella constantemente busca confrontar con nosotros. Nosotros verdaderamente lo único que queremos es que esto tenga el proceso que tenga que tener y que la justicia vea las pruebas que nosotros llevamos. Porque no es que solamente es nuestra palabra. Hay un montón de cosas y la justicia a eso no lo ve. Si bien en una cámara Gessel, en lo que sea, como hoy había dicho en el micrófono para hablarles a todos, quizás una psicóloga puede ser influenciada a través de la empatía que puede generar con una persona.

Pero en un examen forense el que habla es el cuerpo. No habla la persona. Y eso no se puede distorsionar”, agregó Magalí

“Si en el examen forense figura que no hay pruebas y lesiones compatibles con un abuso sexual, no entiendo por qué mis hermanos todavía están presos. No entiendo por qué uno está condenado”.

“El fiscal Ortigoza que cuando yo fui a denunciar a esta persona me mandaron a fiscalía. Yo fui, el fiscal me recibió y cuando me recibió lo que hizo el fiscal fue hacerme un interrogatorio. Lo que menos hizo fue darme una solución con respecto a lo que yo estaba sufriendo con esta mujer”, añadió.

“Ahora esta persona se mudó a barrio Granaderos ( de Fray Luis Beltrán), en el mismo lugar donde yo también levanto pedidos. Y la otra vez una camioneta delante de una clienta me encaró que casi se suba el cordón para chocarme. Entonces nosotros estamos cansados. Si ellos dicen que la verdad sale a la luz, que se abstengan a lo que tiene que hacer la justicia, que se abstengan a eso, pero ya basta de escracharnos, basta de amenazas, basta del acoso, porque la verdad que a nosotros no nos sirve y a ellos menos”, finalizó Magalí.