Crece la incertidumbre en la empresa y en los trabajadores que no saben cuándo cobraran el 70% restante. El plazo legal vence el 11. Los sindicatos aceiteros habían adelantado que si no se abonaban iban a huelga general.

Vicentin, la emblemática empresa agroexportadora, atraviesa su peor crisis desde que entró en default en diciembre de 2019. Durante el mes de febrero, solo logró pagar el 30% de los sueldos a sus empleados, dejando en suspenso el 70% restante. La empresa explicó que la posibilidad de completar los pagos dependerá de la llegada de nuevos fondos, que podrían provenir de la renovación de contratos de fasón con otras agroexportadoras, aunque esta opción también enfrenta serias dificultades.

Ante esta situación, el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) ha expresado su profunda preocupación y advirtió que, de no normalizarse la situación en los próximos días, podrían implementarse medidas gremiales. La amenaza de un paro nacional que afecte a toda la industria del crushing sigue latente.

Mediante un comunicado que la empresa envió el domingo, explicó “que debido a la crítica situación financiera por la queatraviesa actualmente, se ve imposibilitada de afrontar el pago de la totalidad de los haberes devengados del mes de febrero, por ende, el día lunes 10 de marzo acreditará el 30% del neto correspondiente, siendo una prioridad a medida que se reciban fondos anticipados provenientes de los fazones a realizar, ir cancelando los haberes hasta completar el 100% de los mismos.
Lamentamos esta situación de incertidumbre que afecta directamente en la vida
de nuestros colaboradores. Estamos trabajando con la mayor celeridad posible
en la búsqueda de alternativas para restablecer la estabilidad laboral, alcanzando
acuerdos que permitan normalizar los procesos productivos de las Plantas”.

El viernes, se realizó una reunión entre todas las partes, el juez de Reconquista, Fabián Lorenzini (quien ya no está involucrado en el caso), quedó establecido que Viterra, Bunge y ACA – considerados inversores estratégicos – se comprometen a mantener su posible inversión en la propuesta concursal durante seis meses, a condición de que se homologue el acuerdo.

Durante la sesión, Daniel Succi, secretario de los Aceiteros de San Lorenzo, solicitó la intervención de la empresa. Roald Báscolo, ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la provincia de Santa Fe, siguió de cerca las deliberaciones que duraron tres horas, aunque por su falta de oportunidad no tuvieron efectos concretos ni consecuencias legales.

En cuanto a los salarios pendientes, Vicentin aún no ha logrado confirmar nuevos contratos de faena, que permiten procesar en sus plantas los granos de terceros. Sin estos contratos, la empresa sostiene que no podrá cumplir con una nómina salarial que asciende a aproximadamente $4 mil millones mensuales.

A esta crisis se suma la falta de materia prima para procesar, ya que los contratos de producción con ACA, Bunge y Viterra, que aseguraban el suministro de granos, han finalizado y no fueron renovados. Esta decisión llegó tras un fallo de la Corte Suprema de Santa Fe que declaró inconstitucional la propuesta de pago concursal de Vicentin, frustrando así la venta parcial de la empresa y dejando su futuro en la incertidumbre.

La semana pasada, la empresa estuvo a punto de quedarse sin energía por una deuda impaga, pero un aporte de Bunge y Viterra evitó el corte de suministro en el último momento, permitiendo que la producción continuara.