Según el Indec, la pobreza en el Gran Rosario cayó al 32,4% al cierre de 2024

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informó que la tasa de pobreza en el Gran Rosario descendió al 32,4% en el segundo semestre de 2024, lo que representa una caída de 4,2 puntos porcentuales en un año. A su vez, la indigencia se redujo al 8,5% , reflejando una mejora en los indicadores sociales de la región.

Según el informe, al finalizar 2024 había 439.203 personas en situación de pobreza en el aglomerado rosarino, de las cuales 114.846 eran indigentes . Esto significa que en un año 53.969 personas lograron salir de la pobreza y 31.120 dejaron de ser indigentes .

El comportamiento de estos indicadores en Rosario siguió la tendencia del nivel nacional, donde la pobreza se redujo al 38,1% . Sin embargo, la diferencia entre los números oficiales y la realidad cotidiana puede explicarse por la forma en que se mide la inflación, un factor clave para definir las canastas básicas que establecen las líneas de pobreza e indigencia.

La inflación y su impacto en los indicadores

El salto inflacionario de diciembre de 2023, provocado por la devaluación aplicada por el actual gobierno, disparó los niveles de pobreza en el primer semestre de 2024. En ese período, la pobreza alcanzó un récord del 46,8% y la indigencia llegó al 18,2% en Rosario.

Sin embargo, con la desaceleración del Índice de Precios al Consumidor (IPC) impulsada por la “tablita cambiaria”, la estabilidad en el tipo de cambio permitió una recuperación de paulatina en el segundo semestre. Además, la decisión del Ejecutivo de no actualizar los ponderadores de las canastas básicas para medir la inflación también influyó en los resultados. Según estimaciones, si se hubiera aplicado la medición actualizada del Indec, la inflación de 2024 habría sido 20 puntos mayor .

El contexto de la región

El informe del Indec también señaló que en el Gran Rosario hay 121.839 hogares en situación de pobreza , mientras que 114.846 familias viven en la indigencia .

Los índices de pobreza e indigencia estuvieron fuertemente afectados en 2023 por la sequía que afectó al sector agropecuario y la aceleración inflacionaria. El impacto se profundizó en la primera mitad de 2024 con la devaluación del 118% aplicada en el primer mes de gobierno de Javier Milei.

No obstante, con la estabilización cambiaria y la moderación en la suba de precios, los niveles de pobreza e indigencia comenzaron a retroceder en la segunda mitad del año, ofreciendo un panorama más alentador para el cierre de 2024.

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