La Federación de Trabajadores Municipales lleva adelante un paro provincial este miércoles con múltiples piquetes en toda la provincia. Rechazaron la oferta salarial de los intendentes y exigen una recomposición que incluya a jubilados.

La Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de la Provincia de Santa Fe (FESTRAM) realiza este miércoles un paro provincial con cortes en rutas, autopistas y accesos a las principales ciudades, incluida la capital santafesina, en rechazo a la última oferta salarial presentada por los intendentes en el marco de la paritaria sectorial.

La medida de fuerza fue anunciada por el secretario general de FESTRAM, Jesús Monzón, quien explicó que el gremio rechazó por unanimidad la propuesta, al considerar que no contempla el impacto de la inflación acumulada, que alcanzó un 9,5% en el primer trimestre del año, muy por encima del 5% previsto como tope para revisar los sueldos.

Según detalló Monzón, la oferta oficial consistía en un aumento no remunerativo y no bonificable, lo que excluye a jubilados y pensionados. “Eso no es aceptable. No se puede construir un acuerdo justo dejando afuera a los jubilados”, remarcó el dirigente, quien también cuestionó los efectos negativos de la reforma previsional que demoró los aumentos para los pasivos.

El conflicto también expuso el malestar con la gestión del gobernador Maximiliano Pullaro, a quien acusaron de no cumplir sus compromisos de campaña. “Ha perdido la memoria”, lanzó Monzón, en alusión a la promesa de mantener paritarias abiertas y aplicar una cláusula gatillo para proteger el poder adquisitivo.

Cortes en toda la provincia

Desde temprano, FESTRAM desplegó piquetes regionales en distintos puntos estratégicos. En la ciudad de Santa Fe se registran cortes en los accesos a la capital, mientras que en la región sur hay bloqueos en el límite entre Granadero Baigorria y Capitán Bermúdez, a la altura de la empresa Martín Coppa.

La federación no descarta nuevas protestas en otros puntos del territorio, en función del grado de adhesión al paro. Mientras tanto, el conflicto se mantiene abierto y sin señales de acercamiento entre las partes.