A semanas de haber fallecido 12 personas por covid en una de las salas, el día sábado el Hospital Psiquiátrico de Oliveros, vuelve a ser noticia en la zona.

Esta vez, una jauría de perros en estado salvaje atacaron a un usuario residente del hospital, al punto de necesitar urgente intervención quirúrgica y hospitalización en el Hospital de Emergencias Eva Perón de Granadero Baigorria. Actualmente, informan de dicho servicio, que el paciente se encuentra con aproximadamente 40 heridas por mordeduras.

¿Cómo se llega a que un grupo de perros se convierta en una jauría salvaje? Este es un conflicto que lleva no menos de diez años en este Hospital, en donde sistemáticamente la gente abandona perros y perras que luego tienen cría, que al no tener alimento, crecen en estado salvaje. La jauría actual, data de este año,  territorializada, a la caza de comida  y defensa de las crías, mordieron en varias oportunidades a quienes transitan por la zona, siendo el punto de expresión más salvaje el día sábado.

Enteradas las autoridades del Hospital, nos preguntamos qué de la vida humana se está primando cuando por tantos meses se conocen estos riesgos y no se interviene en la prevención de estas situaciones.

Parece que el modelo asistencial de la locura encerrada tras los muros se cae por su propio peso, o mejor dicho por su propio encierro.

Lejos de la modificación planteada por la Ley Nacional de Salud Mental, en donde se planteaba la urgencia de modificar el modelo de abordar las locuras y transformar los monovalentes ( psiquiátricos) en modelos de asistencia comunitarios, el Hospital de nuestra zona, refuerza las peores expresiones del encierro. Al riesgo del encierro crónico, se le suma el riesgo de no mirar la vida como una prioridad.

Imagen: Información Regional