La Cámara de Apelaciones confirmó el fallo de primera instancia del juez Eugenio Romanini y los policías Adrián Ferreyra y Rodolfo Muller continuarán en prisión preventiva. Las defensas de ambos efectivos del comando radioeléctrico habían solicitado revocar la medida cautelar de fecha 10 de julio cuando el magistrado sanlorencino ordenó la prisión preventiva hasta el 19 de agosto.

Por la defensa del policía Ferreyra, la abogada Nora Gaspire de la Defensa Pública Penal sostuvo que el informe preliminar de la autopsia de Heredia no arrojó una causa determinada probable, como tampoco que pueda achacarse algún tipo de responsabilidad penal porque era Ferreyra quien conducía el móvil policial que llegó primero a la escena, cuando el empleado del maxikiosco les pide que intervengan ante Maximiliano, quien habría estado “molesto” pidiendo una cerveza fiada.

Gaspire añadió que al momento en que Müller detiene a Heredia (se produce un forcejeo entre ambos que caen al piso), Ferreyra presta colaboración en la detención de Heredia y que luego piden otro refuerzo policial que se lo lleva detenido bajo custodia, mientras que el policía en cuestión que queda en el lugar tomando declaraciones a testigos y con el relevamiento de cámaras. “No tiene ningún tipo de intervención mas que de la fuerza para esposarlo (..) no hay ningún accionar que esté vinculado con el deceso de Heredia, fue una actividad que estuvo ceñida a su obligación laboral. Mi defendido no tiene ninguna marca de golpe por lo que no tomó contacto con la víctima . Un testigo refiere que el otro policía Acuña le pega un golpe de puño en la boca que le hace salir sangre.”

Por su parte, el Dr. Marcelo Folch, defensor del policía inspector Rodolfo Müller atacó la resolución del Juez Romanini al calificarlo como “injusta y arbitraria”. “El juez recepta y acoge la acusación fiscal, tenemos una muerte, que tendría q estar caratulada como muerte dudosa o muerte en investigación no como homicidio preterintencional. Es un criterio injusto y malinterpretado, menos aplicando a la prisión preventiva.”

Folch además criticó que a la fecha, el tomógrafo del Hospital Eva Perón donde debe realizarse las imágenes como parte de la autopsia que se realiza bajo el Protocolo de Minnesota, aún continúa roto.

La defensa volvió a criticar lo resuleto por el juez de primera instancia: “La resolución de Romanini pasó por encima de nuestra Constitución Nacional, al derecho a la libertad y el art n° 75 de los tratados internacionales. Que el juez sostenga que toda pena es de cumplimiento efectivo sin importarle la calificación legal es de gravedad institucional ante la tipicidad de la conducta atribuida.”

Al turno de la audiencia de visu, que es una entrevista que la jueza les hace a los imputados sobre cuestiones personales; Müller de 46 años, que se desempeña desde hace 15 años en la fuerza policial expresó: “Lamento muchísimo lo que ha pasado, hay una persona fallecida y cuatro personas que estamos detenidas, nunca fue la intención de ninguno de los cuatro esta situación. Hay muchas cosas, esta bueno que escucharan nuestra versión de nuestra palabra porque hablan de entorpecimiento probatorio, cuando nosotros mismos aportamos hasta las cámaras, que son del propio familiar de Maximiliano y el vecino que es testigo lo encontramos nosotros. Lo que más deseamos es que se arregle ese tomógrafo, se haga la autopsia como corresponde porque estamos hace trece días detenidos y lo consideramos totalmente injusto”.

A su tiempo, Ferreyra, de 28 años y con siete en la policía, agregó: “Las pruebas la pusimos nosotros mismos, porque queremos que se aclare esto, quiero dejar en claro que los allanamientos que se iniciaron fueron en domicilios diferentes y nosotros mismos fuimos a esos domicilios a presentarnos ante la justicia, porque se hicieron en lugares diferentes a nuestros domicilios. La familia de todos la está pasando horrible, es un daño irreparable y espero que se solucione todo rápidamente y se aclare por la situación que estamos pasando”.