Por Nicolás Urbinati (Corresponsal en Madrid,  España) –  Aprovechando el acto de presentación oficial de los equipos para la temporada 22/23 y en el marco del 75 aniversario de  la institución del barrio madrileño de Chamartín,   El Deportista de Pregón se dio el enorme gusto de entrevistar a  Hernán “Pancho” Jasen, ex Alero bahiense que fue parte de la Generación Dorada del Básquet Argentino y que desde hace dos años es el Manager Deportivo del mítico Club Estudiantes, equipo ícono del baloncesto de España y que actualmente milita en la 2da División (Liga LEB Oro). 

Hace pocos años que dejó de jugar y pasó de un lado al otro de la cancha,  ¿ Cómo se dio y se gestó ese cambio profesional? 

HJ – La decisión la tomo cuando estaba jugando en Bahía Básquet con 41 años.  Me encontraba muy feliz de continuar haciendo lo que me gusta pero creí que era el momento para poder dejarlo,   ya que temía mucho el no estar bien física y mentalmente para prepararme para una temporada nueva. Me comprometo mucho con las situaciones y de ninguna manera quería fallarle al equipo ni a mí,  por lo que encontré en ese momento una decisión que me llevó tiempo tomarla, porque afectaba a algo que hice durante buena parte de mi vida, pero creo que fue el momento ideal para efectuarla. Y referido al cambio a esta nueva vida, estoy contento porque sigo relacionado con el mundo del básquet, que es mi vida,  aunque desde otro sector. Por lo que,  igualmente, ayudando desde afuera uno puede sentirse a gusto haciendo estas cosas

¿Qué evaluación hace de su nueva faceta profesional?

HJ – Es un aprendizaje y algo muy distinto a lo que venía haciendo.  Obviamente que cuando uno juega,   muchas veces decide situaciones en el momento y ahora es todo más meditado; sobre todo a la hora de gestionar plantillas, jugadores, cercanía con entrenadores y planificación y metodología de trabajo.  Es algo distinto pero también está relacionado con el básquet, uno lo toma con tal, y estoy contento de ejercerlo en lo que es mi casa,  donde jugué muchísimo tiempo profesionalmente

Esta temporada deportiva 2022/23 coincide con los  75 años  del Club Estudiantes, ¿Cómo se está preparando la institución  para este aniversario y usted a nivel profesional y personal?

HJ –Nos estamos preparando bien y con muchísima ilusión a sabiendas que  cumplimos 75 años, que eso es mucha historia dentro del Club, y con un desafío muy grande por delante que vuelve a ser el de luchar cada partido y ser protagonistas en la Liga LEB Oro. Intentaremos conseguir el ascenso de categoría, sabiendo que hay equipos con presupuestos más altos, como Burgos y Andorra, a diferencia de la temporada pasada. Pero nosotros estamos con ilusión, con un grupo de chicos y de técnicos que están por la labor de trabajar muy fuerte para tratar de volver a la primera división,  la ACB.  Y con respecto a las Chicas, el continuar estando en esas posiciones de lucha por Play-Off o clasificar a la Eurocup, sabiendo que no es sencillo ninguna de estas cosas. Que se haya logrado esto en los últimos años, no significa que sea fácil y por eso tiene mucho mérito lo que se viene consiguiendo en la Liga Femenina y hay que continuar por ese camino.

Jugó durante 10 años en este club, ¿qué  significa el Estu en su vida y de qué manera describiría a la institución?

HJ –Estudiantes es mi casa, mi familia y el lugar donde más feliz me sentí profesional y personalmente.  Mis hijos nacieron aquí y  tuve años muy buenos y otros no tanto deportivamente,  pero esto último no importa porque las cosas salieron y sacamos siempre  al equipo adelante. Lo que queda es eso, muchas emociones y momentos vividos que guardo y que me hacen sentir contento de seguir estando aquí adentro.

¿Qué evaluación hace de su primera experiencia como Manager Deportivo durante la temporada pasada?

HJ- Sabiendo que llegaba en una situación atípica y con una presión muy grande en cuanto a lo que deportivamente estábamos jugando con los chicos, que era lograr el ascenso, también buscábamos tener una base de jugadores jóvenes que tuvieran lugar en el primer  equipo y que puedan ganar  ciertos minutos como se dio con Adams Sola e Ignacio Arroyo entre otros. Luego el resultado deportivo no fue el que esperábamos ya que si bien competimos, Granada fue el equipo que mejor hizo las cosas en la liga regular y luego Girona con el ingreso de Marc Gasol potenció mucho su plantilla. La situación es la que fue y debemos aprender de ella,  sabíamos de antemano que iba a ser una competición muy dura y que no se iba a ascender por ser el  Movistar Estudiantes. Esto es deporte, muchas veces uno se prepara, te  quedas muy cerca de conseguir el objetivo, fuimos Segundos en la fase regular  con mucha diferencia con el resto de los equipos, pero luego te la juegas a un partido y es lo que pasa. Mientras con las chicas creo que muy bien porque han clasificado a la Eurocup y Copa de la Reina. Y con respecto a las categorías de Formación, seguimos figurando  entre los clubes Top de España y eso es algo que debemos seguir manteniendo. El balance es positivo, con algunas cosas que no se dan como uno esperó pero sí es verdad que seguimos creciendo y que el club está muy vivo

¿Cómo describe a la Liga LEB Oro?

HJ- Veo una liga muy dura, física y competitiva donde cada partido es una Final y en la cual encuentras equipos que trabajan en la semana para mostrarte tus falencias y, a su manera,  tratar de hacer el juego que más les conviene. Es un poco distinta a la ACB porque ésta es más abierta y tiene mayor ritmo, mientras que la LEB es una categoría, muchas veces, de planes más estratégicos para tratar de sacar la ventaja o las deficiencias del rival. 

Estudiantes es mi casa, mi familia y el lugar donde más feliz me sentí profesional y personalmente

Introduciéndonos en su etapa de  jugador, ¿Ha cambiado su época con la actual en cuanto a juego y jugadores?

HJ- Puede haber cambiado el tema físico,  ya que creo que hoy es todo más atlético aunque depende de la competición que se vea. La ACB es mucho más atlética y una liga donde, muchas veces, los cinco jugadores no son de los pesados que van a buscar los puntos debajo de la canasta, sino que son más livianos, ágiles, con capacidad para tirar de tres puntos y  hay un ritmo más alto. Se juega a una velocidad distinta a la que me tocaba jugar a mí. 

¿Qué recuerdos tiene de los  6 equipos dónde se desempeñó profesionalmente como jugador, tanto en Argentina como en España?

HJ- Andino de La Rioja fue mi  primer club, con Oscar “Huevo” Sánchez como entrenador  que me dio la oportunidad de estar en un equipo de liga y fue el primer paso para conocer el nivel que me iba a encontrar en esa clase de competición, después de venir de jugar en el club donde me formé de chico. Después en Estudiantes  de Bahía Blanca viví los momentos más lindos que pude pasar por estar cerca de la familia y amigos. Cuando sos joven muchas veces no se tiene esa presión de ganar sino de asumir cualquier aventura,  y así formamos un grupo genial de amigos que nos permitió pasar años muy buenos, con cancha llena en Bahía Blanca que hacía bastante tiempo que no se daba. Posteriormente emigré  a  Gijón que fue mi lanzadera para lo que fue mi carrera en España, mi primer lugar para competir en ACB y conocer otras culturas y  otros jugadores. Luego vine a Estudiantes que, como dije anteriormente, es mi casa, donde más tiempo estuve y mejores recuerdos puedo tener de mi etapa deportiva.  Durante un año el Cajasol Sevilla me acogió con los brazos abiertos para tratar de seguir fortaleciendo un proyecto interesante que tenía en ese momento, donde jugamos también Copa del Rey y Play- Off. Y luego terminar en Bahía Básquet, junto con Juan Ignacio “Pepe” Sánchez, un camino de retorno o cierre de círculo profesional que me permitió que mis hijos me puedan ver jugar. Tampoco me debo  olvidar del club de toda mi vida que es Alem, donde me formé en Bahía Blanca y sigo siendo parte del mismo,  desde el lugar que sea,  ya que es donde empecé a jugar y tengo los mejores recuerdos de mi infancia.  

¿Qué significa haber formado parte de la Generación Dorada del Seleccionado Argentino de Básquet, con el que fue campeón del Preolímpico 2011 y disputó el Mundial de Turquía 2010 y los JJOO de Londres 2012?

HJ- Es un orgullo y algo que supera completamente todo lo soñado porque cuando uno es chico y te dicen que vas a jugar en la Selección y/o a representar a tu país en un Mundial o Juego Olímpico, no te lo crees. Miro para atrás y todo eso con la Selección es algo que superó mis expectativas y no hay nada más lindo que representar a tu bandera, a tu país, a todos los que querés, en competiciones de gran magnitud.  Es algo inigualable. 

¿Cómo ve a la Selección Argentina en la actualidad y a Pablo Prigioni como Entrenador?

HJ- A la Selección la veo bien, con algunos cambios que ya se vienen haciendo desde hace un tiempo, que es lógico y normal, pero se sigue teniendo gente que está comprometida y el Legado se mantiene.  Se va pasando de jugadores a jugadores lo que es el esfuerzo y el dejar la piel en cada partido,  más allá de ganar o perder, y eso continúa y es un poco la seña de identidad que nos hace ser reconocidos y respetados en el Mundo. 

Miro para atrás y todo eso con la Selección es algo que superó mis expectativas

Por último, ¿Qué objetivos tiene a corto/ mediano plazo?

HJ- Seguir creciendo en esta fase nueva que me toca en la vida. He hecho mucho como jugador y ahora estoy en otra etapa distinta. Lo que quiero es que con el compromiso que tengo siempre y la responsabilidad que he asumido como jugador, seguir trasladándola  fuera de la cancha, ilusionarme con todo esto y que al Estudiantes le vaya  fenomenalmente bien.