Por Nicolás Urbinati (Corresponsal en Madrid,  España) – Mediante contacto por video llamada, sistema de comunicación  híper utilizado y de moda en esta nueva “normalidad” de vida impuesta por la  impiadosa  pandemia del COVID-19,  El Deportista de Pregón se dio el gusto de entrevistar a  Cristian Toro, entrenador argentino que  conduce técnicamente los destinos del Sevilla FC  en la Primera División del Fútbol Femenino español. 

   Desde su casa en la bella ciudad y capital de Andalucía, este  bonaerense de 40  años  que hace casi una década se encuentra dirigiendo a clubes importantes en  la Liga Iberdrola – nombre comercial de la máxima categoría femenina- , brindó  a este medio un  interesante  análisis sobre  su  actualidad del club hispalense,  de la Liga y del Fútbol femenino nacional. 

Está por comenzar su  tercera  temporada  como DT  del Sevilla FC Femenino,  ¿qué  balance es el que realiza, hasta el momento,  en el mismo?

CT – El balance es positivo. Cuando llegamos al club, en diciembre de 2018, el equipo estaba último, llevaba  diez derrotas consecutivas y una situación muy complicada en muchos aspectos,  y la verdad que esos seis meses fueron duros pero nos salvamos del descenso en la última jornada y también logramos clasificarnos  hasta las Semifinales de la Copa de la Reina.  Y la temporada siguiente, esta última que pasó, fue más irregular en cuanto a resultados ya que nos costó mucho ganar fuera de casa aunque volvimos a llegar hasta las Semifinales de Copa.  Con lo de la Pandemia y lo que nos tocó vivir a todos, terminó siendo una situación compleja aunque  es verdad que esperábamos terminar mucho mejor debido a que  ya habíamos enfrentado al Barcelona, al Atlético de Madrid y el Levante, los equipos quizás más fuerte de la categoría, y nos quedaba por medirnos con  mayoría de  rivales que estaban  de mitad de tabla hacia abajo. 

¿Y cómo está preparando esta nueva temporada  de Primera División que comenzará el 3 y 4 de octubre y dónde debutan ante el Santa Teresa, uno de los recién ascendidos a la categoría? 

CT – Es una pretemporada atípica y difícil porque tenemos que adaptarnos a muchas cosas y prácticamente no hemos hecho  amistosos en todo este tiempo. Después de siete meses, la primera prueba de competir  es directamente por los tres puntos en la Liga  ante un rival muy duro, un recién ascendido, al que conocemos bien  porque estuvo  en la categoría años anteriores y sabemos de las dificultades que genera jugar en un campo artificial y con unas dimensiones más estrechas de las habituales.  Tenemos un inicio duro, con la semifinal de Copa de Reina de la temporada pasada frente al Barcelona en el medio de las primeras jornadas de la Liga, pero que debemos afrontarlo con la ilusión de hacer bien las cosas.

Se encuentra en Sevilla, una ciudad que vive el fútbol de manera muy  intensa,  en especial el clásico Sevilla vs. Betis. ¿Esa pasión y rivalidad que palpa en el derbi masculino,  también se vive  en la rama Femenina? 

CT – La verdad que sí. Yo había estado muchos años en el  Valencia dónde el clásico es con Levante y es muy lindo espectáculo, pero  la verdad  que en  Sevilla el  derbi  es muy  diferente. Aquí  la gente es mucho más  pasional en  ese partido  y, por lo general,  vive el fútbol de una manera muy parecida a lo que sucede en Argentina.  Los dos derbis que he vivido, durante la primera temporada, fueron muy lindos pese a que el primero fue a los diez días de haber llegado y perdimos 2-3 en casa y luego empatamos 1 a 1 en el  estadio Benito Villamarín, en un encuentro muy disputado, en el que concurrieron  22 mil espectadores.

Antes de  tomar al Sevilla, estuvo siete años en el Valencia, ¿qué  recuerdos tiene del paso por el conjunto Ché?

CT– Recuerdos muy lindos porque  también cuando llego al Valencia reemplazando a Xavi Tamarit, el segundo de Mauricio Pellegrino en varios equipos y que escribió libros de táctica, el equipo marchaba último y nos salvamos del descenso en la última jornada. Luego  se vivieron años de crecimiento, de mayor competitividad  y  de   muchas alegrías donde,  por ejemplo, llegamos a una Final de Copa de la Reina y  en mi última temporada, finalizamos en la 3ra posición, peleando  casi por ingresar a Champions. 

Está por cumplir su 10mo año en la Primera División de la Liga Femenina, ¿cómo fue el progreso de esta categoría, en general,   desde que llegó en 2011 hasta la actualidad?

CT- Hay  un avance  abismal y  la comparación sería  la de una Liga regional con una Profesional.   Por empezar antes  casi no había  jugadoras extranjeras, los sueldos no  eran profesionales aunque sí se recibían  viáticos y después estaba el tema de la logística, como viajes y campos de juego. Hoy en día, en estos  últimos cuatro años se disputaron partidos en estadios grandes como  el Wanda  Metropolitano, San Mamés de Bilbao, Riazor de La Coruña, Mestalla en Valencia;  la gente apoyó a sus equipos femeninos y se  vivió una fiesta. Y a nivel  competición, cada vez hay más competencia, hay un convenio profesional de trabajo y se avanzó mucho en la parte física y  nutricional.  Todo esto hace que la Liga  sea mucho más competitiva,   atractiva de ver y mejore como espectáculo.  

A lo largo de estos años ha  dirigido, en distintos planteles,  a las argentinas Estefanía Banini y Marianela Szymanowski en Valencia y a Aldana Cometti en Sevilla, ¿Cómo definiría a cada una de ella y qué les aportaban las mismas  a sus equipos?

CT – Estefi Banini, cuando llegó al Valencia desde Washington, era  y   es una jugadora diferencial en el uno contra uno,  posee remate y tiene gol.  Es una líder que además lo demuestra en la Selección Argentina. Tiene unas condiciones muy grandes, disfruté mucho de su juego  y la verdad que estoy contento de  haberla dirigido ahí. En el Valencia también tuve a Marianela Szymanowski, una jugadora desequilibrante, muy buena técnicamente y con mucho gol que también me dejó un muy lindo recuerdo. Y a Aldana Cometti la dirigí año y medio en Sevilla y fue muy importante para el equipo porque es contundente, fuerte defensivamente y muy competitiva. 

En la temporada 20/21 del Fútbol Femenino Español  habrá un importante número de futbolistas argentinas tanto en Primera como en Segunda División. ¿ A qué cree que se debe esto?

CT – Se debe a que la jugadora argentina, o la sudamericana, se adapta mucho más rápido a España  por una cuestión cultural,  las  costumbres  y el idioma, que hace todo mucho más fácil esa incorporación. La Liga Iberdrola ha  progresado mucho, se abrió el mercado y seguramente que a medida que la Selección siga haciendo buenos papeles,  como en el último Mundial, la expansión de  jugadoras argentinas incrementará porque hay muy buen material.

Cómo imagina la nueva temporada  20/21 de la Liga Iberdrola?

CT- Considero  que va a ser una Liga más competitiva que en los últimos años, en muchas cosas. Creo que hay tres equipos por encima del resto que son Barcelona, Atlético de Madrid y Levante, con la opción de un cuarto candidato que es Real Madrid dependiendo de cómo se vaya  desarrollando el proyecto que idearon con tantas jugadoras nuevas.  Y después hay muchos conjuntos que van creciendo, que van incorporando gente, y va a estar muy disputado todo donde cada partido será una historia diferente.  Nuestra intención es  ser competitivos y crecer como equipo ya que representamos a un club grande como el Sevilla y queremos estar lo más alto posible,  pero somos conscientes de cómo es  cada adversario, de la dificultades de los campos y que tenemos que centrarnos en el día a día para mejorar todo lo que podamos. 

Por último, ¿cuáles son sus expectativas personales y profesionales para esta nueva etapa?

CT – Mi expectativa profesional es  que el equipo transmita competitividad, los valores que este club tiene y el poder ganar muchísimos partidos, por lo que trabajaremos  a destajo por ello. Y en lo personal, tratar de ser mejor entrenador y persona y en eso centrarme. La verdad es que estoy muy contento tanto en la ciudad como en el club, creo en el proyecto y  esperemos que lo podamos hacer grande y que todos disfrutemos de  un Sevilla fuerte en esta categoría.