Las autoridades del efector provincial Granaderos a Caballo derivan los testeos a la Municipalidad de San Lorenzo, cuya estructura sanitaria se ve saturada por absorber a pacientes de toda la región.

La tercera ola de coronavirus azota a todo el territorio nacional y se genera una altísima demanda de testeos por parte de la población con síntomas y situaciones de riesgo. En ese contexto, una caprichosa decisión del directorio del hospital provincial Granaderos a Caballo puso en jaque la estructura sanitaria de la ciudad de San Lorenzo: no realizan hisopados y derivan los casos a las dependencias del municipio, que ya atienden más de mil casos semanales.

La insólita decisión repercute directamente en cientos de pacientes de la región que no saben a quién acudir cuando necesitan hisoparse, ya que el centro de salud de referencia (el Hospital Granaderos a Caballo) no les da respuesta.

Muchos optan por irse a Rosario o a Granadero Baigorria, pero quienes no pueden movilizarse quedan desamparados. Entonces son enviados por las autoridades del Hospital Provincial a la Municipalidad de San Lorenzo. Y ahí se genera otro problema: la afluencia en masa satura el sistema sanitario sanlorencino, que viene funcionando con eficiencia pero no está pensado para absorber a cientos de pacientes de localidades vecinas.

“Vaya al CIC”

Es por eso que se vivieron situaciones de incomodidad en la mañana de hoy, durante una de las jornadas de testeo que la Municipalidad de San Lorenzo realizó en el CIC de barrio Mitre. De pronto, sanlorencinos que aguardaban su turno para ser atendidos vieron cómo se alargaba la fila con personas eyectadas del Granaderos a Caballo.

No tenían turno para hisoparse y se trataba casi en su totalidad de personas oriundas de otras localidades de la región. “Fui a hisoparme al Hospital pero me dijeron que ellos ahí no testean, que tenía que ir al CIC”, se escuchó, desorientado, a más de uno.