Así lo acordaron Fiscalía y Defensa luego de una serie de informes médicos que determinaron que Spini debía estar alojado en una institución de salud mental debido a alucinaciones paranoides que sufre el agresor debido al consumo excesivo de drogas desde los 24 años.

Iván Marcelo Spini, el hombre de 37 años imputado por amenazas a su ex pareja Eliana, será internado en una institución psiquiátrica de Rosario. Así lo acordaron hoy en audiencia la fiscal Melisa Serena y la defensa del imputado. La jueza Griselda Strólogo ordenó que siga en prisión preventiva internado sin plazo, hasta que haya un nuevo informe médico que confirme que Spini está estabilizado de su adicción a las drogas.

Spini tiene más de una decena de denuncias desde 2015 por amenazar, de muerte acosar y hostigar a su ex pareja con quien tienen una hija menor de edad de 8 años en Capitán Bermúdez. En enero, lo habían imputado por una serie de mensajes, llamados y mails que el hombre le envió a Eliana con graves amenazas. Además de que en el mes de noviembre del año pasado quedó registrado en las cámaras de la vivienda del padre de la víctima, un piedrazo que arrojó el hombre y que rompió la luneta del automóvil que estaba estacionado.

La historia de Eliana tenía más de 20 legajos llenos de denuncias de agresiones, amenazas, disturbios e incumplimiento de restricciones de acercamiento, que muchos prescribieron por el paso del tiempo. Nunca en cinco años, la justicia había tomado la decisión de detenerlo a pesar de la abultada evidencia. Por ello, Eliana tuvo que recurrir a los medios de comunicación para solicitar ayuda.

En el mes de enero a Spini, la justicia ordenó la prisión preventiva por 60 días y hoy en una nueva audiencia donde se debía definir la prórroga de la prisión, las partes acordaron que el imputado debía quedar internado pero en la condición de detenido. En estos dos meses una serie de profesionales de la salud señalaron que Spini sufría alucinaciones y paranoia, provocado por el consumo de estupefacientes como la cocaína desde hace más de diez años. Por ello, la fiscal Serena y el abogado de la defensa Sebastián Darrichón acordaron la internación del imputado, con un plazo mínimo de entre 30 y 45 días para que sea estabilizado y puedan realizar una nueva audiencia en la que se evaluará si continuará en un establecimiento de salud mental, o en una cárcel. Resta definir en que institución quedará alojado que cumpla con las condiciones de internar a una persona en condición de detenido.