Una mujer que se desempeñaba como empleada de seguridad de la clínica 21 de diciembre fue despedida en plena pandemia del coronavirus. El telegrama de despido lo envío la empresa Spartan para quien prestaba servicios por solicitar un permiso para cuidar a sus hijos.

La difícil situación de Eliana comenzó cuando el gobierno nacional decreta el cierre de los establecimientos educativos, el pasado 15 de marzo, como una de las primeras medidas ante el avance del coronavirus. La mujer envío una nota a la empresa de seguridad Spartan, comunicando que a raíz de la pandemia y como está sola al cuidado de sus cuatro hijos, iba a ausentarse cada vez que sea necesario. La empresa le contestó con un telegrama de despido.

Eliana relató a Pregón que cuando el presidente Alberto Fernández decretó el cierre de las escuelas, ella se quedó sola al cuidado de sus cuatro hijos, y sin un familiar que pudiera cuidarlos, incluso el progenitor de los chicos trabaja en Capital Federal y que, asesorada por un abogado, presentó un aviso ante la empresa de que se ausentaría hasta que finalice la cuarentena.

El problema comenzó cuando el viernes 20 de marzo, Eliana fue hasta la jefatura local para buscar una constancia de que no podía trabajar y que cuando le pasó por captura de teléfono al supervisor la nota, le dijeron que no tenía validez. Por tal motivo, envió una carta por correo electrónico realizada por un abogado, informando que no podía presentarse a trabajar

«Ahí comenzó el infierno» señaló Eliana quien contó que sus compañeras mujeres le contaron que eran «avisadas» por el supervisor de la empresa, que ella iba a ser echada, suspendida o que no iba a cobrar y «el 14 de abril me llegó una carta documento de que en 48 horas yo tenía que presentar toda la documentación sobre mi ex pareja de donde estaba trabajando él y que le pasara todos los datos y que al no presentar ninguna información decide despedirme»

Hasta el día de hoy, ella no cobró tampoco los días por los cuales si prestó servicios durante marzo. Desde el gremio de los vigiladores Sutravip, señalaron que se encuentran con el equipo de abogados buscando una solución para que la mujer no pierda su trabajo, ante una situación inevitable, como la de tantas mujeres que quedaron solas con sus hijos en esta pandemia.

La empresa Spartan que comenzó a funcionar el pasado año siendo contratada por la cooperativa de trabajos portuarios, ya había despedido a dos delegados, y tuvo que dar marcha atrás en noviembre, luego de negociaciones con el gremio de la vigilancia en la cual fueron reincorporados.