El próximo jueves 22 de junio no habrá clases con normalidad en la provincia de Santa Fe. Los gremios de la docencia pública y privada santafesina informaron que se suman al paro nacional de 24 horas anunciado por Ctera y Sadop, en el marco del conflicto en Jujuy tras el reclamo salarial y la sanción de la reforma constitucional de esa provincia.

Amsafe comunicó la decisión en «repudio de todo tipo de accionar que atente contra los derechos de las y los trabajadoras/es». Entre los motivos, se señaló la «represión al pueblo jujeño», el «absoluto rechazo a la reforma constitucional» y solicitando «urgente aumento salarial a las y los docentes jujeños».

La Confederación apuntó, mediante un comunicado que lleva la firma de la santafesina Sonia Alesso, secretaria general del gremio nacional, contra el gobernador de Jujuy y precandidato presidencial de la UCR, Gerardo Morales, por impulsar una «Constitución inconsulta y antidemocrática» y reprochó que «ante los paros contundentes y las multitudinarias movilizaciones responde con represión». Asimismo, se anunció que la junta ejecutiva se trasladará a Jujuy para «acompañar la histórica lucha de la docencia».

Por su parte, este martes por la noche, el Sadop Santa Fe anunció su adhesión a la medida dispuesta por la central nacional del gremio. «Consideramos inadmisible cualquier intento de sofocar los justos reclamos laborales y políticos y reafirmamos nuestro compromiso militante con la lucha de toda la docencia por la recomposición del salario y dignas condiciones laborales», fundamentaron.

En el plano universitario, también la Conadu Histórica -que nuclea a docentes de la Universidad Nacional del Litoral- convocó al paro nacional del jueves 22 «en solidaridad con el pueblo de Jujuy y contra la represión».

El paro de este jueves 22 de junio se superpone con una medida de fuerza anunciada anteriormente para los departamentos Rosario y San Lorenzo y de la que también participarán otros gremios, que conforman junto con Amsafe la Multisectorial por la Paz en Rosario.

En ese marco, el pasado 13 de junio se llevó adelante en las escuelas una jornada en contra la violencia y en defensa de la vida. Además, en Rosario, los docentes de escuelas tanto de gestión estatal como privada, junto con trabajadores estatales y del sector de salud, realizaron manifestaciones públicas pidiendo protección para la comunidad educativa.

«Entendemos es que las acciones se tienen que llevar adelante en unidad con los docentes de toda la provincia, pero también con todas las organizaciones. Es una equivocación pensar que este problema es sectorial. Hay algo que se está reflejando en la escuela pública y es, por un lado, la crisis económica, que la vemos en la cantidad de alumnos que van a los comedores escolares, que piden el ropero escolar -zapatillas, vestimenta-, pero también se está viendo en la violencia», había señalado el titular de Amsafe, Rodrigo Alonso, a El Litoral.

En el mismo sentido, la Secretaría de Políticas Educativas de la CGT y el Consejo Directivo de la Unión Docentes Argentinos se expresó «con enorme preocupación» por la violencia que atraviesa la provincia de Jujuy y por las balaceras contra las escuelas de Rosario. Mediante un comunicado, llamó a la reflexión por «la afectación grave de nervios sensibles de la vida democrática y repudia cada uno de los hechos de violencia perpetrados contra las ciudadanas y los ciudadanos».

(Con información de El Litoral)