El personal que se desempeña en la operación de la Planta de Tratamientos de Líquidos Cloacales de la zona oeste de la ciudad recibió el viernes 12 de agosto una capacitación que apuntó a sumar el conocimiento necesario para optimizar la tarea en la etapa del proceso de deshidratación del barro en el tramo final de su funcionamiento.

Inaugurada por el intendente De Grandis en septiembre del 2021, la planta cuenta con una tecnología inédita en la provincia de Santa Fe que no existe en ningún municipio, similar a las plantas existentes en Europa, con la función de recoger los líquidos cloacales de Tierra de Sueños, La Pedrera, y San Sebastián Norte en esta primera etapa, mejorando la calidad de vida de los vecinos y preservando el medioambiente.

Pero se distingue por el proceso de “barros activos” que consiste en el desarrollo de un cultivo bacteriano disperso, una masa coagulada de partículas de un líquido en un depósito agitado, aireado y alimentado con el agua residual, que es capaz de metabolizar como nutrientes los contaminantes biológicos presentes en esas aguas.
 “Todo el barro biológico que se genera en los reactores se pasa por un desecador que transforma el barro que queda acumulado en el fondo en un abono que se puede utilizar para macetas, plantas en la vía pública, relleno sanitario”, amplió el ingeniero Francisco Benassi  representante de ARCASA, empresa dedicada al tratamiento de aguas residuales y potabilización de aguas.

Durante la capacitación, los especialistas destacaron la calidad de agua de la planta luego de todo el proceso de tratamiento de los efluentes. Su funcionamiento trata de un pre tratamiento, tratamiento, sedimentación, deshidratación de lodos, cloración de carga y se obtiene agua tratada.

“Es muy beneficioso que esta planta produce finalizado el tratamiento agua de calidad apta para riego, cumpliendo las normativas que existe el Ente Regulador de Servicios Sanitarios (ENRESS), pero a la vez la calidad que tiene nos permite utilizar el agua para riego de calles y de arbolado público. La normativa impide el uso de esta agua y del abono para  plantas que producen alimentos”, manifestó.  

Asimismo, indicó que “el agua se extrae directamente con los camiones regadores y el abono se aloja en cestos que se pueden utilizar, o bien embolsar o del modo en que sea más práctico”.

La planta de tratamiento de líquidos cloacales de Puerto trabaja con dos reactores en paralelo, cada uno de ellos alcanza para unos cuatro mil habitantes de forma normal. Además, cuenta con un sistema que incluye un pozo de bombeo para elevar la cota de ingreso del efluente, un filtro tamiz estático autolimpiante para el desbaste inicial del efluente, un sistema de barros activados concéntricos (Reactor Biológico y Sedimentador), y un sistema de cloración en cisterna.