Escándalo en la Policía de Rosario: Intervienen la Unidad Regional II por millonaria malversación en el área de combustibles

El gobierno provincial desplazó a las autoridades de la URII tras una investigación que dejó 17 detenidos, 13 de ellos policías. Se detectaron maniobras ilegales por más de 45 millones de pesos. “No vamos a permitir que algunos vivos hagan negocios particulares con la seguridad”, advirtió el ministro Cococcioni.

Una investigación por malversación de fondos públicos en el área de combustibles de la Unidad Regional II de la Policía de Santa Fe culminó este lunes con 38 allanamientos, 17 personas detenidas (13 de ellas policías) y la intervención inmediata de la fuerza. Así lo anunció el ministro de Justicia y Seguridad de la provincia, Pablo Cococcioni, en conferencia junto a fiscales del MPA.

El operativo surge tras una pesquisa de más de 10 meses, iniciada por una denuncia anónima, que reveló una red organizada de maniobras fraudulentas para apropiarse de fondos estatales destinados al combustible de móviles policiales. Los implicados habrían generado un perjuicio de más de 45 millones de pesos, utilizando tarjetas Visa Flota que fueron halladas en domicilios particulares.

“La maniobra creció con el aumento del patrullaje y la cantidad de móviles en calle. Es un atentado contra la seguridad pública”, expresó Cococcioni, y aseguró que “la posición del Gobierno de la Provincia es inamovible en nuestro compromiso con la seguridad y contra la corrupción institucional”.

La intervención de la URII se efectivizó en simultáneo con los procedimientos. Fue designado como interventor el director general retirado Claudio Romano, reincorporado al servicio activo. Además, se ordenó una auditoría integral de gestión en el área de logística y movilidad.

El fiscal regional Matías Merlo y el fiscal José Luis Caterina detallaron que también se investiga la participación de los propietarios de una estación de servicio y que los implicados dentro de la fuerza policial ocupaban cargos jerárquicos. Por el momento, ni el jefe ni el subjefe de la URII están implicados.

“La inversión en seguridad debe ir acompañada de controles estrictos. No vamos a permitir que unos pocos lucren con lo que debe garantizarse para todos: la seguridad de los ciudadanos”, sentenció el ministro.

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