Un trabajador que realizaba tareas dentro de la empresa Vicentín resultó con el 50% de su cuerpo quemado tras sufrir un accidente con un  recuperador de cenizas.

Ariel Cardozo de 30 años de edad, se encontraba el domingo cerca de las dos de la madrugada en el sector de calderas, limpiando un recuperador de cenizas cuando al destapar una escotilla esta explotó a raíz de una fuerte presión.

Según precisaron desde el sindicato aceitero: « la caldera tiene un recuperador de cenizas, que depende lo que está quemando va a un lugar que recupera esas cenizas, lo que pasó acá es que esas cenizas estaba encendidas, ese recuperador tiene tres bocas  y una de ellas tenía fuego y se le vino encima», señaló Pablo Reguera, secretario general del sindicato aceitero.

«Ese recuperador está unido a la caldera, y allí se queman, cáscaras de girasol, y esas cenizas van a parar ahí, es un sistema que trajeron de Brasil pero que no estaba funcionando bien, el problema es que empezaron a quemar fuel oil y  no funcionaba como corresponde».

Cardozo resultó con el 50% de su cuerpo quemado, comprometiéndose su tórax, cuello, espalda y brazos, pudo salvar su rostro porque tenía un barbijo y sus manos porque utilizaba guantes. Fue derivado al sanatorio Británico de Rosario donde quedó en terapia intermedia.

La empresa ahora deberá enviar un informe sobre lo ocurrido en la planta donde según señalan  el filtro de ese recuperador  no estaba en condiciones óptimas y acumuló fuego.

Cardozo no corre riesgo de vida pero deberá realizar una larga rehabilitación debido a que  sufrió quemaduras en un 50%.

Hasta el momento, la empresa no emitió ningún comunicado oficial sobre lo ocurrido.