La Fiscal Dra. Marisol Fabbro de la Unidad de Homicidios Dolosos se refirió a la investigación del femicidio de Nora Escobar. «Tiene heridas de arma blanca en el cuerpo pero no se pudo determinar la causa de la muerte hasta que no esté el resultado de la autopsia», aseguró.

Nora Escobar tenía 43 años y fue otra víctima de femicidio. Mientras la hija la buscaba desesperadamente, estaba enterrada debajo de un contrapiso en el patio de la casa donde convivía con su pareja, detenido a las 16 h de este miércoles en Misiones, intentando escapar.

Gregorio Britez (52), sindicado como autor del femicidio, fue encontrado por Gendarmería en la zona de frontera con Paraguay, luego de permanecer prófugo. Fuentes oficiales informaron que será trasladado en los próximos días a la ciudad de Rosario para ser llevado a audiencia imputativa por femicidio.

La última vez que vieron a Nora con vida fue el 22 de abril y según informó la fiscal Fabbro, su teléfono estuvo estuvo prendido y ubicado en la vivienda de calle Liniers al 1700 donde convivía con Britez, hasta ese día a las 22:12 h. Su Facebook también fue analizado ya que la hija, Karen, aportó clave y usuario a la investigación. Allí, Nora daba como ubicación el domicilio donde convivía con su marido, con quien estaba casada desde el año 2019.

Tras un segundo allanamiento del domicilio, vino el trágico fin de la búsqueda de la mujer: «Volví a insistir con ese domicilio porque había información de que habían realizado como un sobrepiso en el patio de la vivienda y eso llamaba categóricamente la atención ya que lo hizo con posterioridad a la denuncia de la desaparición de Nora», indicó la fiscal y explicó que en este operativo, Bomberos rompieron el concreto en un área de unos cuatro metros por tres de ancho para facilitar la labor de los canes.

Cómo mataron a Nora será revelado cuando se conozcan los resultados de la autopsia que se realiza bajo el protocolo femicidio y estipula un tiempo determinado. Sin embargo, Fabbro indicó que «tiene heridas de arma blanca en el cuerpo pero no se puede determinar la causa de la muerte hasta que no esté el resultado de la autopsia».

Hasta la detención de Britez, había un único detenido: su amigo de toda la vida y padrino de su hija mayor, Alberto Antonio L. (58), que será imputado por encubrimiento agravado. «No hay evidencias de que haya colaborado en el hecho del homicidio, pero sí con posterioridad», aseguró Fabbro. Cuando fue consultado por el paradero de Britez dijo que hacía unos meses que no lo veía, mientras testimonios de los vecinos indicaban lo contrario. Luego, aceptó que lo había visto y que Brítez había estado en su casa dos días atrás pidiéndole dinero porque se iba a ir, pero no le dijo dónde. «En el vehículo de esta persona se constató luminol positivo en cuanto a rastros de sangre y también en el interior de la vivienda, prácticamente en todos los ambientes», aseveró la fiscal.

Por su parte, el presunto femicida había sido entrevistado por personal de Paraderos de AIC y manifestó que desde octubre no veía a Nora, que se habían distanciado se habían peleado.» Mientras, los vecinos del lugar decían que la habían visto hacía 10 o 12 días antes y que habían escuchado ruidos como de cosas que se rompían, vidrios y gritos», relató la fiscal.

En cuanto a las denuncias previas por violencia de género, Fabbro indicó que hay una constatada de marzo del año pasado por parte de Nora donde se hizo una restricción de acercamiento. En ese sentido, agregó que testigos aseguraron que la propietaria de la vivienda donde ellos vivían, que era alquilada por Britez, fue a manifestar que ella consideraba que debía vivir él ahí porque había firmado el contrato de alquiler, por eso él volvió y Nora se fue a la casa de su madre y al tiempo, volvió a vivir con él.

Declaraciones de la Fiscal Marisol Fabbro

El dolor de Karen

Karen Gigena movió cielo y tierra para encontrar a su mamá. Uno de los empleadores de Nora, que era empleada doméstica, le avisó que no iba a trabajar desde el 21 de abril y esa luz roja la llevó a la comisaría 24 donde relató lo que sucedía.

También dijo que temía que Brítez le hubiera hecho algo a su mamá porque anteriormente la había golpeado y provocado quebraduras en la mano y la nariz, agresiones que fueron denunciadas oportunamente. Sin embargo, habían vuelto a relacionarse. 

Karen sospechaba de la pareja de su madre por los antecedentes de violencia de género y fue a verlo para recabar información. Britez le dijo que Nora se había ido hacía tres meses, que se habían separado porque le encontró mensajes con otro hombre y que se había llevado todas sus cosas.

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