El sector gastronómico y hotelero de Rosario, enfrenta desafíos significativos debido a la ola de terror, que ha afectado a la ciudad en los últimos días. La Asociación Empresaria Hotelero y Gastronómica expresó su preocupación por la disminución de clientes y la paralización de la ciudad durante el fin de semana pasado.

Las restricciones en el transporte público, que estuvo ausente durante cuatro días, junto con el temor a posibles ataques, han llevado a una disminución en la actividad de bares y restaurantes. Donde, la facturación se ve especialmente afectada en horarios nocturnos, siendo este el período de mayor actividad para el sector.

En respuesta a la situación, se ha formado un «comité de crisis» y se espera el despliegue de las Fuerzas Armadas y los agentes federales en la ciudad. Sin embargo, la incertidumbre persiste en cuanto a cuándo se restablecerá la normalidad y cómo se recuperará la confianza del público en este contexto de violencia y temor.

A pesar de la preocupación, el sector gastronómico y hotelero se mantiene optimista respecto a una eventual recuperación, especialmente con el retorno del servicio de colectivos que facilita la movilidad de las personas. No obstante, la decisión de taxis y remises de no operar por las noches sigue siendo un obstáculo para la reactivación plena del sector.